Aranguren: «Mi cliente no declarará porque no conozco el contenido de la causa»

Tanto Sinaí como su hermano Juan Paulo han salido del furgón policial entre un fuerte dispositivo que mantiene blindado el edificio judicial cangués donde se han podido escuchar gritos contra los gitanos zamoranos, el clan enemigo, y la Guardia Civil. Fuera, varias personas relacionadas con la familia insultaban tanto a los agentes como a los periodistas concentrados a las puertas.

Se acusa a la familia de los morones de pertenencia a organización criminal, amenazas, coacciones, fraude a la Seguridad Social , blanqueo de capitales, tenencia ilícita de armas y tráfico de drogas.

A su llegada a los juzgados el abogado de Giménez, José Luis Gutiérrez Aranguren , ha señalado a los medios que desconoce la causa, declarada secreta, y que, en consecuencia recomendará a su patrocinado acogerse a su derecho a no declarar. También a la mujer de éste último. «Tengo por costumbre cuando no conozco el contenido de la causa aconsejar que no se declare», ha dicho.

De los once detenidos del martes, siete fueron trasladados desde los calabozos , el padre de Sinaí permanece hospitalizado bajo arresto, y tres quedaron en libertad en sede policial ya el martes. De estos últimos al menos dos están citados hoy a declarar . La operación continúa abierta y, fuentes de la Guardia Civil, han confirmado que no se descartan nuevos arrestos en el marco de esta operación.

La vista se desarrolla en medio de una gran expectación. Entre los asistentes se encuentra el mediático letrado Marcos García Montes y no dejan de oírse gritos de «injusticia».