EBB, el órgano del PNV que decidió el «no» a Feijóo
El órgano ejecutivo del Partido Nacionalista Vasco ha decidido extender su cordón sanitario también al PP, con quien ni siquiera se sentará pese a que ganó el 23J
Se regula en sus estatutos conforme a los «marcos normativos básicos de los Estados español y francés» y considera a su sede en Madrid como «extraterritorial»
El presidente del EBB, Andoni Ortuzar, junto a Íñigo Urkullu y Aitor Esteban
Este lunes el presidente del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, comunicó ante la Junta Directiva Nacional del partido que había iniciado la ronda de contactos con los distintos partidos con representación en el Congreso tras el escrutinio del 23J en busca de apoyos para ... su posible –pero poco probable– investidura como presidente del Gobierno. Además de con Vox, Coalición Canaria y UPN dijo haber hablado con el Partido Nacionalista Vasco, cuyos cinco escaños, como los de las anteriores formaciones, son imprescindibles para alcanzar una mayoría de 176 que le abra las puertas de la Moncloa.
Sin embargo, tras un primer intercambio de mensajes, anteayer el propio Andoni Ortuzar, presidente del Euzkadi Buru Batzar (EBB), comunicó a Núñez Feijóo vía llamada telefónica su negativa.
Ni siquiera para sentarse a negociar con la formación que más votos y escaños ha conseguido en los comicios celebrados el pasado domingo. El motivo, según han defendido los representantes peneuvistas, haber «cruzado líneas rojas» al incorporar a Vox a las instituciones.
Este 'no', que deja al PP sin posibilidades reales de formar Gobierno, se gestó tras una reunión del EBB este mismo lunes. Se trata del órgano ejecutivo del PNV, que cuenta además con otro legislativo y judicial, se regula en sus estatutos conforme a los «marcos normativos básicos de los Estados español y francés» y, dentro de la concepción nacionalista del partido, tiene representación a nivel nacional, territorial, extraterritorial –Argentina, México, Venezuela, Chile y Madrid– y municipal.
Pero, a pesar del trámite de la reunión de ayer del EBB, la realidad es que el PNV mantiene un pacto estructural con el PSOE, que compromete la gobernabilidad de las instituciones dentro del propio País Vasco y que hacía muy complicado su apoyo a Feijóo ya antes de las conversaciones con Ortuzar. Esto se da en el propio Gobierno de la región, donde el PNV de Iñigo Urkullu gobierna en coalición desde 2020 con el apoyo del Partido Socialista de Euskadi.
Además, una segunda clave son las elecciones autonómicas que tendrán lugar allí en 2024 y que, dada la competición que el PNV mantiene con Bildu, un pacto a nivel nacional con el PP (y Vox) podría debilitar sus posiciones frente a la formación abertzale de cara a estos comicios.