Las «sombras» de los cargos a dedo

Desde que comenzara el relevo al frente de los diferentes departamentos de Salud de la Comunidad Valenciana, han sido numerosas las críticas por las «dudas» que ofrecen los nuevos nombramientos de la Conselleria de Sanidad, dirigida por Carmen Montón .

La primera controversia llegó con la designación de la exsenadora del Partido Socialista de Cataluña (PSC) Mónica Almiñana como gerente de La Fe. Al no cumplir con el requisito de ser personal estatutario -tener plaza de funcionaria en la Sanidad valenciana-, Montón decidió convocar un concurso con unas bases «a medida» para que Almiñana pudiese optar . Pero se presentó otra aspirante, la psiquiatra Mayte Lázaro, a quien finalmente rechazó la comisión de valoración, como esperaba, y ha llegado a presentar un recurso contencioso contra la decisión de la Conselleria .

A este caso se sumó el del marido de Montón, nombrado d irector gerente de Egevasa , la empresa mixta participada por la Diputación y por Aguas de Valencia. La presión -incluyendo la de la vicepresidenta de la Generalitat, Mónica Oltra, quien afirmó que no le parecía «estético»- provocó su renuncia al puesto .

Entre las contrataciones a dedo también se encuentran las de una decena de miembros del PSPV ascendidos a gerentes o jefes de departamento en hospitales o centros de salud . La mayoría de ellos son exalcaldes y exconcejales de localidades como Sagunto, Castellón, Elche o Valencia . Especialmente destacado es el caso del exprimer edil de Benimodo, quien ocupa la subdirección general de Recursos Económicos de la Conselleria. Como informó «Las Provincias», está imputado por un delito contra el Patrimonio y la fiscalía pide para él más de dos años de cárcel.