Los alumnos valencianos tendrán una asignatura de educación afectivosexual a partir de los seis años

Oltra ha puesto en valor que es la primera vez que la Generalitat implanta esta herramienta para dejar atrás «los aterradores porcentajes de mujeres que han sufrido algún tipo de violencia» y dar respuesta a «una necesidad social». «Las violencias sexuales son un problema social global de primer orden , arraigado en un sistema sociocultural patriarcal y machista que opera a través del poder, el sometimiento y el control de sus cuerpos, sexualidad y vida», ha señalado.

En este sentido, el 60,5 por ciento de las mujeres de entre 16 y 24 años dicen haber sufrido algún tipo de agresión sexual y el 81,2 por ciento de las violaciones se producen por hombres que la víctima conoce, según una macroencuesta realizada en 2019 por la Delegación de Gobierno contra la Violencia de Género.

Por ello, la estrategia se erige como un instrumento trasversal que permita erradicar este tipo de agresiones, atender a las mujeres supervivientes -tanto de acoso como de abusos, mutilación genital o explotación- para derivarlas al recursos asistencial adecuado y establecer mecanismos de prevención.

Además de al ámbito académico, se pretende trasladar también esta visión a las asociaciones juveniles y al entorno laboral, con la ayuda de profesionales que puedan detectar los signos de alarma y el recabado de más datos sociológicos.

Uno de los puntos del documento incluye el desarrollo de un programa de atención e itinerarios de acompañamiento y alternativa sociolaboral y residencial para mujeres prostituidas , que se suma a la puesta en marcha, a través de la renta valenciana de inclusión, de una prestación para aquellas que se comprometan a un itinerario de inclusión social que incluya salir de la prostitución.

Preguntada durante la rueda de prensa sobre las discrepancias de entidades y partidos en la elaboración de este plan, Oltra ha destacado que 54 de la 65 entidades que componen el pacto valenciano contra la violencia de género y machista participaron en la reunión en la que se preparó la propuesta y todas habían recibido previamente el texto.

«¿Si no vienen a las reuniones, cómo vamos a conseguir el consenso?», se ha preguntado. « No tengo una güija para crear el consenso» , ha añadido aludiendo a las críticas de la oposición, partidos a los que ha acusado de no realizar aportaciones: «Quien calla, otorga».