SíQueEsPot apoya que Puigdemont plantee un referéndum pactado con el Estado

«No pidamos una cosa con la esperanza de que nos digan 'no' para justificar otro discurso. Si pedimos un referéndum al Estado hay que trabajar para que sea posible y convocar a la sociedad civil catalana», ha subrayado y ha apuntado que el Pacte Nacional pel Dret a Decidir podría ser un marco de encuentro.

Rabell considera que la única solución es una consulta con garantías y reconocida internacionalmente, y que las vías unilaterales dejan aparcados a muchos catalanes que no se sentirían llamados a participar, mientras que el resultado de una consulta reconocida internacionalmente sería «insoslayable».

«No hay atajos», según él, y ha advertido de que independentistas y federalistas se pueden encontrar en el ámbito del derecho a decidir pero no en un escenario de repetición de lo que ya se ha hecho.

Pese a todo, Rabell, que se define federalista, insiste en que la demanda de un referéndum no puede desvincularse de un debate social, y que una buena oportunidad para abordarlo será el debate de los Presupuestos 2017: «Las aspiraciones sociales, democráticas y de progreso se resolverían mejor en el marco de un autogobierno de soberanías compartidas con el resto de pueblos».

Al preguntársele sobre el papel que puede jugar el futuro partido que impulsa la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, ha respondido que una mayoría social de progreso es «inimaginable sin formaciones como ERC», pero considera que no debe menospreciarse también a una parte del PSC.

El líder parlamentario ha lamentado que el exconseller y portavoz del PDC en el Congreso, Francesc Homs, deba declarar este mismo lunes ante el Tribunal Supremo (TS) en la investigación del 9N: «El camino de la judicialización de un conflicto político es una vía sin salida».

«Después de esto ¿qué? ¿Más juicios? Si hay una protesta, ¿judicializarán y criminalizarán la respuesta? Esto no lleva a ningún sitio. Un problema política debe situarse en el diálogo», ha sostenido, y ha trasladado su solidaridad a Homs así como al resto de encausados por el 9N, en referencia al expresidente Artur Mas y las exconselleras Joana Ortega e Irene Rigau.