«A Garzón le diría que deje los experimentos y que quizá sea mejor presentarnos con nuestras siglas»

-La semana pasada cumplió 250 días como alcalde de Zamora ¿en este tiempo ha visto que es más difícil ser alcalde que oposición o al contrario que es más productivo?

-Creo que las dos cosas son difíciles. En la oposición me hice un hueco y el resultado del trabajo fue bueno. Ser alcalde es otra cosa, aunque igual de difícil. Estamos luchando por sacar adelante nuestro programa y arrancar un Ayuntamiento que tenía muchas cosas por hacer, casi todas. Espero que en la Alcaldía me haga un hueco de cara al futuro porque esto acaba de arrancar.

-¿Pesa más que estén puestos en usted los focos de los medios nacionales por ser la única capital de provincia con alcalde de Izquierda Unida?

-Creo que no. Eso fue la principio, los tres primeros meses, cuando hubo una gran expectativa nacional, pero con el paso del tiempo se ha visto que lo que quiero es ser un buen alcalde de mi ciudad. No pretendo nada a nivel nacional. Lo pretendo todo a nivel local.

-¿Cómo ve la «bicefalia» autonómica de Izquierda Unida, con un coordinador general, José María González, distinto de la voz de IU en las Cortes de Castilla y León, José Sarrión?

-Eso forma parte de las circunstancias y no es el primero ni será el último partido que tiene esa bicefalia. Habrá una asamblea regional tras la nacional de mayo y ya veremos de cara al futuro si continúa. En las primarias (José) Sarrión se impuso a José María (González) en un sistema democrático y lo considero normal.

-¿Ve a José Sarrión un buen coordinador general de IU de Castilla y León para el futuro?

-Sí...igual que a José María (González). Yo soy un hombre de partido. Llevo en IU desde su fundación y me parece bien cualquier candidato que elija la asamblea. Sarrión hasta ahora ha demostrado que es un magnífico procurador como lo fue José María los cuatro años anteriores. Si en el futuro se unifica el procurador con la coordinación de Izquierda Unida me parece bien. Yo me llevo perfectamente con los dos y estoy para ayudarles.

-¿Luchan por el mismo voto actualmente Podemos e Izquierda Unida?

-Creo que no, aunque coincidamos en alguna parcela. Lo que persigue Podemos está más dirigido a todas las capas sociales, lo mismo que intenta recoger el PSOE y el PP. Es lo que llaman los politólogos el voto «atrapalotodo». Sin embargo, el de IU es más sectorial. Nosotros nos dirigimos más a los trabajadores, a la gente más desfavorecida. El de Podemos es un voto más «light», más dulce.

-¿Sería partidario de un acuerdo de investidura entre PSOE e IU?

-Sí, me gustaría que en la investidura hubiera un pacto de izquierdas.

-¿Le gustaría que Alberto Garzón fuera ministro al igual que hay concejales socialistas en el Gobierno municipal de Zamora?

-Son circunstancias diferentes. Que se forme un Gobierno de izquierdas es muy necesario para España y para Zamora como ciudad marginal que es periferia de la periferia. En lo de que entrar en un Gobierno de izquierdas en España hay muchas reservas en nuestra organización por una cuestión matemática, porque somos dos diputados. En todo caso, respaldo a Garzón en lo de hacer una consulta antes de decidir una posible entrada en el Gobierno. Otra cosa es la investidura.

-¿Ha tenido la oportunidad de hablar con Garzón tras las «declaración de Zamora» en la que se defendió la continuidad de las siglas de IU? ¿Si pudiera hacerlo qué le diría?

-No. Le diría que Zamora ha sido una ciudad de acogida de muchos militantes y cargos públicos que deseaban que en el futuro las siglas de IU tuvieran un peso más importante en la confrontación electoral. Hay otro grupo de Izquierda Unida que quiere seguir con más experimentos a ver si cuaja mayor apoyo electoral. Las dos opciones son válidas y legítimas. Le diría que esté tranquilo con respecto a la «Declaración de Zamora» como nosotros estamos tranquilos con él. No es el enemigo, el enemigo es la derecha. Lo que queremos decir, de cara al futuro y a la asamblea de mayo, es que ha habido muchos experimentos que no parece que hayan tenido el éxito esperado y que quizá sea mejor presentarnos con nuestras siglas, que entiendo que es lo que quiere la mayoría de los militantes de base.

-¿Mostrar lo que se hace en Zamora no sería una forma de «enganchar» a más votantes?

-A mí me parece bien que se puedan ofrecer los resultados, que se diga esto es una guinda haciendo escaparate de ello, pero nada más. Cuando veo militancia de IU en Valladolid, Palencia o Ávila hay que reconocer que son más potentes que en Zamora.

-¿Descarta compatibilizar la Alcaldía con cargos de relevancia regional o nacional en el partido?

-Sí. Apoyo en todo a mi organización pero ni yo ni mi equipo podemos prescindir ahora de trabajar en la Alcaldía al cien por cien, aunque en todo lo que podamos ayudaremos a nivel regional o nacional. Lo que no quiero es un partido que se llame Izquierda Unida que al cabo de tres o cuatro años sólo exista en Zamora. Espero que después del verano, cuando todo esté calmado, IU dé un impulso porque quiero tener un partido de referencia a nivel nacional, con un programa de transformación de España, si no, ¿qué narices pinto yo aquí?

-¿Si se planteara en mayo la integración con Podemos lo rechazaría?

-Lo veo imposible por ambas partes, ni creo que la militancia de Podemos esté en esa línea ni lo está la de IU. Esto no quiere decir que no tengan que entenderse como grupos.

-¿De qué tiene que hacer propósito de enmienda Izquierda Unida para haber sacado entonces menos representación que Podemos en las últimas elecciones?

-Demasiado experimento interno.

- ¿Piensa que en junio habrá de nuevo elecciones?

-Creo que no aunque muchos las desean. No las habrá porque los electores porque los electores darían de bofetadas a los partidos que provocaran esa situación.