Castilla y León ofrece acogida y camas hospitalarias al pueblo ucraniano

«Estamos conmocionados e indignados por la guerra en Ucrania» , aseguraba este domingo en su perfil de Twitter el presidente en funciones de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, quien avanzaba que desde el Ejecutivo autonómico «vamos a hacer todo lo que esté en nuestra mano para ayudar a las personas que están sufriendo esta sinrazón».

En esta línea, y un día después de que su homóloga madrileña, Isabel Díaz Ayuso, ofreciera a los refugiados ucranianos las instalaciones del Hospital Isabel Zendal -con hasta mil camas-, Mañueco seguía ayer sus pasos y hacía su propio ofrecimiento a escala de las posibilidades de la Comunidad, con la puesta a disposición de 100 camas de planta hospitalaria y 10 de UCI, así como la red de centros de atención primaria «por si fuera necesario» asistir a las víctimas. «Aumentaremos estos recursos en caso de que se requiera», señala el presidente de la Junta.

Del mismo modo, el popular ha avanzado que se ha activado la comisión de cooperación entre consejerías para poner en marcha «los instrumentos y recursos necesarios para esta emergencia» . Se refiere con ello a políticas enfocadas al acogimiento de quienes huyan del conflicto y que incluirían ayudas en el ámbito de la vivienda, la educación, la sanidad y el empleo.

Unas actuaciones transversales para las que la Junta de Castilla y León se propone estar «siempre en coordinación con el Gobierno de España» y con las acciones que en la misma línea se pongan en marcha a nivel estatal desde el Ejecutivo que dirige Pedro Sánchez.

Castilla y León es «una tierra solidaria y acogedora. Estaremos a la altura de esta atroz situación» , sentenciaba en sus redes sociales Fernández Mañueco, quien ha brindado en nombre de todo el Consejo de Gobierno «todo nuestro apoyo y solidaridad con Ucrania».

Entre las miles de personas que el domingo ponían un pie a salvo tras escapar del conflicto estaban la embajadora de España en Ucrania, la vallisoletana Silvia Cortés, que llegaba a Polonia donde se quedará, por el momento, con el ánimo para dar la atención necesaria a quienes permanezcan en la zona, según ha informado el Gobierno, que avanza que unas 140 personas procedentes de Ucrania que fueron evacuadas en dos convoyes escoltados por los GEO llegarán hoy al país en avión.

Precisamente Mañueco en Twitter se ha referido también a la embajadora vallisoletana a la que daba las «gracias» junto a la policía por «proteger» a ese convoy con la delegación de españoles deseando que «acabe ya esta barbarie».

Mientras, en las calles de León cerca de dos millares de personas tomaban la ciudad para pedir el fin de la guerra en Ucrania, donde «la gente ya está perdiendo el miedo a morir» , lo que «les ayuda a pensar en cómo salvarse y cómo salvar esta situación», según ha asegurado la ucraniana afincada en León, Olga Maslovska, quien añade que su pueblo «va a luchar hasta último momento», algo que «da pena porque van a ser muchos muertos».

La ucraniana ha puesto de relieve el apoyo de toda la sociedad, escenificado en una marcha que partió de la Plaza de Guzmán y que recorrió la avenida Ordoño II hasta concluir en la Plaza de Santo Domingo. «El apoyo de la gente es importante para Ucrania y los ucranianos porque nos hacen ver que cuando necesitemos ayuda podremos contar con ellos», informa Ical.

Una ayuda que se hace prioritaria para los soldados que «tienen necesidades alimentarias» y, «lo más curioso» y lo que «destroza el corazón» es que «sobre todo, necesitan calcetines», resalta Maslovska, al tiempo que explicaba que el domingo por la tarde un autobús cargado de cosas compradas para los ucranianos salía de León con destino a Polonia, donde «no se sabe si podrán ser repartidas», ya que «el tráfico está muy complicado por Ucrania y todos tienen miedo a moverse».

En Valladolid, el autor y los promotores del espectáculo ‘África, un canto a la paz’ han convocado, por su parte, una concentración en la Plaza Mayor bajo el lema «la paz es tuya» para pedir el cese del conflicto en Ucrania y en los que hay en el resto del mundo. Tras la lectura de varios manifiestos por la paz, la maquilladora oficial del espectáculo, Valentina Menschchikova, de origen ruso, ha lamentado «nadie quiere la guerra, todos deben aunar fuerzas y pedir el cese de este conflicto» , informa Ep.