Campofrío tiende la mano a Embutidos Rodríguez «para lo que puedan ayudar»

Valdés participó en el Hotel NH ciudad de Valladolid en el I Seminario de Alta Dirección de Empresas Alimentarias, organizado por Vitartis y el Instituto San Telmo y patrocinado por CaixaBank. En su intervención expuso la experiencia vivida con el incendio que arrasó la fábrica de Campofrío en Burgos el 16 de noviembre de 2014, y desgranó cómo se gestionó la crisis: «Hay muchos manuales y simulacros para gestionar crisis. Nosotros hemos aprendido que cuanto mejor preparado estás mejor sales , pero también hemos aprendido que nunca estás preparado al cien por cien. Hemos aprendido la importancia de decidir rápido y bien, de que cada uno haga lo que sabe hacer, de coordinar y liderar bien la situación, porque todo se derrumba a la vez».

En su opinión, es decisivo que en un siniestro como el vivido en Burgos no se registraran desgracias personales . «Si no hay desgracias personales la gestión es más sencilla, es ver cómo me suministro, hasta que tenga la nueva fábrica si es que la voy a hacer, cómo mantengo la marca, los clientes y los empleados...», resumió.

Para Valdés, es fundamental saber dirigir la solidaridad recibida «hacia el sitio adecuado», ya que eso «permite que la compañía se crea que puede salir». «Conseguir que los empleados, vendedores, clientes y todos confíen en que hay salida es la clave», expuso. En ese sentido, recordó como ejemplo un email que recibió del director comercial de Alcampo, en el que éste le decía: «Mira que nos hemos pegado veces, pero hasta que tengáis la fábrica nueva tenéis todo el apoyo de Alcampo». «Eso te da mucho ánimo, y te hace pensar que nadie va a aprovechar la situación parta dejarte atrás», remató.