Y si se anula el POM, ¿qué?

Para la oposición, resulta claro que la nulidad del POM conllevará consecuencias económicas. Jesús Labrador, portavoz del PP, dijo este miércoles que con la sentencia que dicte el TSJ «volveremos a la indefinición, incertidumbre jurídica» . Y se preguntó: «¿Qué va a ocurrir con el nuevo hospital, con el pago de los impuestos, con el desarrollo industrial?».

Labrador añadió que el posible perjuicio económico lo tendría que abonar la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha y recordó que en 2014 Emiliano García-Page, entonces alcalde de Toledo y hoy presidente regional, así lo manifestaba: «Sin el POM no tendríamos La Abadía ni el nuevo hospital y la responsabilidad la tendría la Junta de Comunidades , y sería ella la que tuviera que correr con los gastos que se pudieran producir para con la ciudad de Toledo».

Desde Ciudadanos, la concejala Araceli de la Calle anunció este miércoles que su grupo va a presentar una moción en el pleno de marzo para que el Ayuntamiento toledano devuelva las plusvalías cobradas a aquellos contribuyentes en los que su inmueble no se revalorizado, sino todo lo contrario. Cobrar este impuesto cuando, en realidad, hay una minusvalía «atenta contra los principios de equidad, justicia y capacidad económica del contribuyente», dijo ayer De la Calle.

Tanto desde la Junta de Castilla-La Mancha como desde el Gobierno municipal, ambos en manos del PSOE, apuestan por no precipitar los acontecimientos. Sobre la posibilidad de que el TSJ anule el POM (algo que hizo en 2011, con lo cual parece evidente que ahora fallará de la misma manera), la consejera de Fomento, Elena de la Cruz, dijo este miércles: «No anticipemos una decisión del TSJ. Esperemos a que se pronuncie, y en qué sentido, porque no vamos a hacer de adivino».

El portavoz del Gobierno municipal, José Pablo Sabrido, sí admitió lo obvio. Así, en el caso de que se anulara el POM, el Ayuntamiento está «absolutamente preparado para cualquier contingencia» y tendría «herramientas suficientes para garantizar el desarrollo de la ciudad». Sin embargo, Sabrido no aclaró cuáles son esas herramientas.

En lo que sí coincidieron De la Cruz y Sabrido es en que la anulación del POM no tendría efectos retroactivos. «Esta sentencia afectaría a actos futuros», dijo la consejera. «Difícilmente podría tener efectos retroactivos respecto a lo que ha recaudado el Ayuntamiento», añadió el portavoz municipal.

La anulación del POM vigente supondría que Toledo se tendría que regir por el anterior plan, que se aprobó en 1986, hasta que se aprobara uno nuevo. Una de las banderas del actual Gobierno municipal es la creación de un nuevo POM, más acorde con las circunstancias y no con la realidad anterior a que estallara la crisis económica.

Cuando llegó a la Alcaldía, en junio de 2015, Milagros Tolón prometió que el nuevo POM estaría en un año. Hace meses, el concejal de Urbanismo, Teo García, dijo que el POM se aprobaría durante la legislatura y que lo que iba a estar en un año era el proyecto inicial. La realidad es que después de más de año y medio de legislatura, aún no está ni el proyecto inicial. Preguntado por ello, Sabrido no dio este miércoles ninguna fecha sobre el nuevo POM.

También este miércoles, el portavoz del PP dijo que «tendemos la mano» al Gobierno municipal para buscar una «solución definitiva» a este problema y que esta pasaría por aprobar un nuevo POM.