El Ayuntamiento estudia el cambio de líneas en los autobuses urbanos

Para esta tarea han contado con la colaboración de los conductores de esos autobuses, que durante varios días han anotado el número de viajeros que subían y bajaban en la plaza de Zocodover en determinadas líneas y horarios concretos. Este céntrico emplazamiento es el lugar donde termina la mayoría de las rutas del servicio urbano, que realiza la empresa Unauto por la prórroga del contrato hasta el próximo 31 de diciembre. El estudio también se amplía a otras líneas cuyos trazados discurren por la zona de Palomarejos y Buenavista, pero que no terminan en Zocodover.

«Con los técnicos municipales, estamos comprobando si algunas rutas son necesarias. Si tienes una línea en la que un autobús sale a las siete de la mañana y no se sube nadie durante quince días, esa línea no interesa», explica el concejal. «También estamos comprobando si se puede ahorrar recorrido en algunas líneas —añade—, ya que no se puede permitir que un autobús se desvíe dos kilómetros para pasar por una parada en la que nunca se sube nadie».

La comisión técnica cuenta con el asesoramiento de la misma empresa que hace dos años hizo un estudio de líneas y paradas y que sirvió de base para el anterior concurso de licitación del servicio, que finalmente no se llevó a cabo.

Además de posibles cambios de horarios y recorridos, se está estudiando ampliar la ruta del autobús circular (línea 12) con un vehículo más pequeño. Para otras líneas, se está planteando la posibilidad de que los usuarios soliciten en la calle con un dispositivo que el autobús pare en la marquesina antes de llegar. Asimismo, los técnicos están barajando dar más servicio al campus universitario de la Fábrica de Armas porque los alumnos no están satisfechos con la línea actual. «Podría ser más rentable si la enlazáramos con otros puntos», propone el concejal.

Otro objetivo que se ha marcado la comisión municipal es tratar que dejen de subir el mismo número de autobuses urbanos que suben actualmente hasta Zocodover. «No podemos estar permanentemente metiendo hasta la plaza vehículos de 17.000 kilos, llenos de gente, porque están deteriorando las calles. No es lo más lógico ver autobuses de 17 toneladas pasando permanentemente por la puerta del Cambrón», puntualiza Pérez del Pino.

Los resultados de estos estudios «y las decisiones tomadas» se conocerán a finales de abril, asegura el edil. En mayo se comenzaría a preparar el pliego de condiciones para la licitación del servicio para que salga a concurso antes del verano. «Una vez adjudicado el servicio, los posibles cambios en las rutas deberán estar en marcha a primeros de 2017», advierte el responsable de la concejalía de Movilidad, Seguridad Ciudadana y Protección Civil.

«Estamos trabajando para tener todos los datos y estudios necesarios que nos den o quiten la razón. Yo sé que hagamos lo que hagamos, si a alguien le rompemos una inercia a la que está acostumbrado, va a protestar», admite. «Yo no aspiro a perpetuarme en el puesto, solo aspiro a hacer lo correcto», sentencia.