Los olivicultores de Castilla-La Mancha recibirán 18 millones para paliar los daños de ‘Filomena’

Así lo anunció este martes el consejero del ramo, Francisco Martínez Arroyo , que asistió al Comité Regional de la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA) de la región donde, en declaraciones a los medios, explicó que estas ayudas vienen a financiar las tareas necesarias para recuperar el potencial productivo perdido por el olivar castellanomanchego a causa de ‘Filomena’.

Así, Martínez Arroyo desgranó que se podrán optar a ayudas de hasta un máximo de 12.000 euros por explotación que cubrirán la totalidad de los costes del arranque y plantación de olivos, así como la poda en la base y la poda en las cruces de los olivos tradicionales. En este punto, comentó que también se cubrirán los costes de las labores que ya se hayan realizado a este respecto antes de la convocatoria de estas subvenciones.

Del mismo modo, apuntó que para poder optar a recibir estas ayudas será necesario acreditar que la caída del potencial productivo ha sido superior al 50% respecto a una campaña normal, señalando también que las subvenciones se priorizarán dando más importancia al olivar de bajo rendimiento y estarán dirigidas, sobre todo, a los agricultores a título principal, los jóvenes, las mujeres y los proyectos de titularidad compartida.

El consejero afirmó también que los técnicos de su departamento ya tienen la información de qué parcelas se pueden ver beneficiadas por estas ayudas, aseverando que la provincia de Toledo es la más afectada, donde alrededor de 60.000 parcelas lo están en mayor o menor grado y de las que 17.000 hectáreas tienen la totalidad de olivos secos y necesitarían hacer labores de arranque y replantación.

Por su parte, el secretario general de UPA en la región, Julián Morcillo , quiso ver el futuro con «un moderado optimismo» tras conocer estas ayudas que, destacó, «alivian la dificultad» que sufre el sector.

Morcillo argumentó que, en este caso, la línea de seguros en el olivar «no era efectiva» para cubrir las pérdidas ocasionadas por el temporal, ya que solo el 4% de la superficie está asegurada y apenas un 1% tiene incluido los daños en madera.