Las familias de Castilla-La Mancha se niegan cada vez menos a donar órganos para trasplantes

Estos datos los ha aportado este martes en una rueda de prensa la directora gerente del Sescam, Regina Leal , que ha estado acompañada por la coordinadora de trasplantes de Castilla-La Mancha, María José Sánchez , y el director general de Asistencia Sanitaria, José Antonio Ballesteros .

La comunidad ha alcanzado 82 donaciones en 2016, que supone una tasa de 40,2 donantes por millón de habitantes y es 4,3 puntos superior a 2015 y, también, se sitúa solo 3 puntos por debajo de la tasa de donación nacional.

Las negativas familiares a trasplantes están por debajo de la media nacional y se han situado en el 14,4 por ciento, una cifra «muy difícil de disminuir», ha recalcado Leal.

En este sentido, la coordinadora regional de trasplantes ha señalado que esta disminución ha sido un trabajo «de todos», desde los profesionales hasta la administración y el conjunto de la sociedad.

Ha explicado que lo primero para lograrlo es «informar y formar adecuadamente» , porque, si no se informa de los valores de la donación, la sociedad no se muestra receptiva, y también hay que hacerlo «con una sensibilidad especial» en un momento delicado para las familias.

En el año 2001 la tasa de donaciones en Castilla-La Mancha era de 11,8 por millón habitantes, 21 puntos menos que la tasa media nacional, y en quince años esa diferencia se ha reducido hasta apenas 3 puntos.

De las 82 donaciones realizadas el año pasado, 69 fueron multiorgánicas y 50 de ellas incluyeron donación de tejidos.

Por centros, 34 donaciones se realizaron en el Hospital de Albacete, que ha tenido un incremento del 70 por ciento respecto a 2015, aunque ha sido el Hospital de Guadalajara el que ha aumentado «de forma significativa» su tasa de donación al multiplicarlos por cinco, pasando de dos en 2015 a diez en 2016.

Otro hospital que ha realizado un «esfuerzo muy importante» en la promoción de la donación ha sido Hellín (Albacete), que ha conseguido ocho donaciones de tejidos, ha señalado Leal.

En cuanto al perfil de donantes, la mayor actividad de donación se debe a los accidentes cardiovasculares y el 45 por ciento eran mayores de 70 años e incluso en algún caso tenía 85 años.

La coordinadora regional ha explicado que antes del año 2000 la edad era un factor limitante para la donación que ahora ha desaparecido, ya que el límite que se evalúa en la actualidad es la función de los órganos.

En cuanto al número de donaciones en asistolia (parada cardíaca), se ha duplicado el año pasado y a los hospitales de Albacete y Toledo, que lo tienen, se prevé que este año pueda sumarse el de Ciudad Real.

A este respecto, María José Sánchez ha señalado que en este momento el 11 por ciento de los donantes son en asistolia (pacientes que mueren tras una parada cardíaca) y el objetivo es alcanzar el 20 por ciento pero sin disminuir, por otra parte, los donantes en muerte cerebral.

En cuanto a los donantes de médula ósea, el incremento ha sido del 29,3 por ciento, hasta los 2.271, y en cuatro años se ha multiplicado por treinta el número de donantes, que ha pasado de 79 en 2012 a los 2.271 alcanzados en 2016.

Con estos órganos se han realizado 95 trasplantes de riñón el año pasado: 54 en el hospital de Albacete y 41 en el de Toledo, que son los dos centros autorizados y en los que se han llevado a cabo 734 trasplantes de este tipo desde que se puso en marcha el programa.

En Castilla-La Mancha se hicieron el año pasado 1.357 nuevos carnés de donantes, hasta los 16.490.

Leal ha insistido en que estos datos son fruto de la solidaridad, la concienciación y el trabajo que hacen las unidades de trasplantes y los centros, pero sobre todo del «buen hacer, generosidad y calidad humana» de los ciudadanos de Castilla-La Mancha.