Suscribete a
ABC Premium

El Rey participa en un ejercicio de desactivación de explosivos durante la comparecencia de Sánchez

Tras su reunión con el presidente del Gobierno a primera hora, Felipe VI llegó quince minutos tarde a un acto y no siguió en directo la comparecencia

En directo, toda la información y última hora sobre la no dimisión de Pedro Sánchez

Sánchez no dimite y se autoproclama líder «contra el movimiento reaccionario»

El Rey Felipe VI a su llegada a una visita a las instalaciones del Centro de Excelencia contra Artefactos Explosivos Improvisados' de la OTAN EP
Angie Calero

Esta funcionalidad es sólo para registrados

La reunión de Pedro Sánchez con el Rey a primera hora de la mañana, para comunicarle su decisión de seguir al frente del Gobierno, provocó un retraso de quince minutos sobre el horario de inicio previsto en el acto que el Jefe del Estado tuvo este lunes en el Centro de Excelencia contra Artefactos Explosivos Improvisados de la OTAN, que se encuentra en Hoyo de Manzanares, a media hora en coche desde Madrid.

El Rey tenía programada esta actividad en su agenda oficial desde principios de la semana pasada. Pese a la reunión que mantuvo con Sánchez el pasado miércoles –donde le informó de que sería el lunes cuando comunicaría si seguía o no al frente del Gobierno–, Don Felipe no modificó su agenda, dando así continuidad a la actividad de la Corona que, como Institución, debe dar normalidad y mantenerse neutral ante el curso de la política en España.

Don Felipe llegó a las 10.15 a Hoyo de Manzanares acompañado por el Jefe del Cuarto Militar de la Casa del Rey. Mantuvo una reunión a puerta cerrada con el personal militar que trabaja en este centro de desactivación de explosivos acreditado por la OTAN. Para cuando terminó y salió a la puerta del recinto para hacerse una foto con todos ellos, hacía escasos minutos que Sánchez había anunciado que continuaba al frente del Ejecutivo. Fuentes consultadas por ABC, informaron de que durante la reunión no se hizo ningún receso para que el Rey que pudiera seguir la comparecencia de Pedro Sánchez. Felipe VI ya sabía lo que iba a ocurrir y continuó con normalidad la mañana.

Después de la foto oficial, Don Felipe participó junto al equipo de inteligencia de armas en un simulacro que suelen practicar: en un país extranjero, durante un control rutinario, habían descubierto explosivos dentro de un vehículo. «En ese momento pasamos a realizar lo que se puede llamar un CSI militar», le explicaron. Su trabajo consistió en la toma de fotografías, huellas dactilares, teléfonos móviles y el análisis de explosivos que encuentran en el vehículo… Después, ya en un laboratorio, continuaron elaborando la inteligencia necesaria para conocer la procedencia del armamento incautado.

Al terminar, Don Felipe asistió a otra reunión «clasificada». Como Jefe de las Fuerzas Armadas, el Rey disfruta mucho de estas visitas a los centros militares: se interesa por los avances en cuanto a tecnología y no deja de hacer preguntas. Tanto es así, que siempre finalizan más tarde de la hora prevista. Pero ayer, los responsables de comunicación de Defensa informaban de que el tiempo estaba muy tasado y que a las 13.00 el Rey debía salir hacia La Zarzuela porque a las 13.30 tenía otra reunión.

Una vez allí, en su despacho, siguió de cerca la actualidad y la repercusión de la comparecencia de Pedro Sánchez, con quien mantiene una comunicación fluida y permanente desde que fue investido de nuevo como presidente.

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación