Don Juan Carlos sale a navegar en su primera mañana en Sangenjo

Siguiendo la tónica de ayer miércoles, en su llegada a la localidad pontevedresa después de unos días en Londres, Juan Carlos I ha llegado directamente en coche al puerto deportivo. Eran sobre las 11.30 horas. Y el vehículo en el que el padre del Rey Don Felipe viajaba de copiloto entró en el puerto sin una parada previa en el Real Club Náutico de Sangenjo, que preside su amigo y anfitrión en la localidad, Pedro Campos.

Tampoco esta vez, Don Juan Carlos ha querido hacer declaraciones a la prensa que le esperaba en las instalaciones náuticas. Se ha limitado a saludar desde el asiento de copiloto, igual que había hecho el día anterior.

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Tras bajar las escaleras del espigón con dificultad, apoyado en su bastón y con la ayuda de sus acompañantes, ha saludado a la tripulación. Finalmente se ha subido al Bribón, con lo que despejaba la duda de si navegaría a bordo de la mítica embarcación o lo haría en una auxiliar. Dos minutos antes de las 12.00 horas, el Bribón ha soltado amarras.

Estos 'entrenamientos' en los que está previsto que participe el rey emérito son la antesala de las pruebas que desarrollarán este fin de semana en Sanxenxo, para las que también se cuenta con la asistencia de Don Juan Carlos.

El exmonarca aterrizaba este miércoles en Vigo, siendo esta su segunda visita a España desde que abandonara el país en 2020 y estableciese su residencia en Abu Dabi.

Como ocurrió en 2022, esta visita también está rodeada de una gran expectación mediática y, aunque por el momento en menor medida, también de atención por parte de vecinos y turistas. Algunos de ellos, apoyados en la barandilla del espigón han aplaudido y proferido ánimos y vivas (Viva España y Viva el Rey) al monarca, que ha correspondido al gesto saludando con la mano.