El alcalde Santisteve carga contra la Transición con una retahíla de descalificativos

Tras asegurar que él no se identifica con la Transición sino con los movimientos del 15-M que propugnan una ruptura con la Constitución del 78 y un nuevo proceso constituyente, ha dicho que entre 1975 y 1980 morían en España una treintan de personas cada año en manifestaciones, que no se hizo «limpieza» de la policía política del franquismo, que «los torturadores fueron condecorados» y que la Ley de Amnistía consumó la «autoimpunidad» del régimen.

Santisteve , que es abogado de profesión y profesor de Derecho en la Universidad de Zaragoza, ha realizado estas declaraciones durante la presentación de las jornadas de la Fundación Labordeta que tendrán lugar en las Cortes de Aragón y que están dedicadas a abordar la Transición.

Santisteve acumula en su haber varias intervenciones polémicas desde que llegó a la Alcaldía zaragozana hace un par de años. Por ejemplo, cuando en marzo de 2016, tras las matanzas yihadistas de Bruselas, justificó el terrorismo islamista como una respuesta a «la violencia sembrada» por Occidente . Un año más tarde, aunque con discurso más suavizado, aprovechaba para criticar a la UE durante otra concentración tras atentados yihadistas.

En octubre de 2016, Santisteve se negó a votar una moción de repulsa contra el ataque sufrido en Alsasua (Navarra) por dos guardias civiles y sus parejas. Santisteve y su equipo (la coalición ZEC) prefirieron solidarizarse con los abertzales navarros que consideran que en esos territorios hay una «presencia desmedida» de la Guardia Civil . Meses ante, durante la campaña de las elecciones municipales, Santisteve protagonizó un rifirrafe con el PP tras considerar los populares que el ahora alcalde y su coalición ZEC se habían mostrado ambiguos frente a ETA y su entorno.

El pasado septiembre, el alcalde Santisteve llevó a Zaragoza la controvertida «cumbre» organizada por Pablo Iglesias junto a nacionalistas e independentistas , para defender la autodeterminación en Cataluña. El Ayuntamiento de Zaragoza dispuso de instalaciones municipales para celebrar aquel acto.