Torres y Urdangarín intentaron «colar» dos millones en facturas al Gobierno de Camps
Se trata de 123 facturas presentadas en 2006 y que fueron rechazadas por la subsecretaria de Presidencia
Torres y Urdangarín intentaron «colar» dos millones en facturas al Gobierno de Camps
Iñaki Urdangarín y su exsocio Diego Torres presentaron en 2006 al Gobierno de Camps facturas por valor de casi dos millones de euros, relacionadas con el proyecto presentado por el Instituto Nóos a esa administración para la organización en Valencia de unos «juegos europeos» ... , una especie de juegos olímpicos para el Viejo Continente. La entonces subsecretaria de Presidencia, Isabel Villalonga, ahora imputada, rechazó el pago de 123 recibos de todas las empresas de la «galaxia Nóos», al no estar mínimamente justificados. Sin embargo, esta funcionaria sí abonó otras facturas por valor de 248.000 euros que respondían a estudios del tipo «Qué es el fútbol. Reglamentación».
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El Ejecutivo de Camps presupuestó para el proyecto de esos fantasmagóricos juegos europeos tres millones de euros en 2006 y la misma cantidad en 2007. El primero de los años el Instituto Nóos presentó a la Generalitat Valenciana decenas de facturas que, como proveedoras de la entidad sin ánimo de lucro, habían librado las empresas de Diego Torres e Iñaki Urdangarín —Nóos Consultoría Estratégica, Aizóon, Shiriamisu, Virtual Strategies o Intuit Strategy Innovation Lab—, por e studios de consultoría supuestamente relacionados con el citado eve nto. Sin embargo, a juicio de la subsecretaria de Presidencia, que debía aceptar los pagos, los recibos no estaban suficientemente justificados. En concreto, algunos de ellos no identificaban al consultor que supuestamente había realizado los trabajos, ni sus facturas, y en otros casos simplemente no se aportaban los informes que se pretendían cobrar.
Un listado comprometedor
Una y otra vez Isabel Villalonga fue rechazando esas facturas, hasta un total de 123, por un valor global de unos dos millones de euros. Sin embargo, la subsecretaria no se limitó a devolver los recibos , sino que confeccionó un listado con todos ellos, en el que se incluía la cantidad pedida, la empresa que lo emitía, el concepto por el cual se libraba y la razón por la que se rechazaba el abono. Esa precaución ha permitido que ahora ese documento, de tres folios, esté en manos de los investigadores y se haya convertido en una prueba importante contra Torres y Urdangarín.
No obstante, Villalonga sí autorizó el pago de facturas por valor de 240.000 euros de trabajos realizados por la empresa valenciana Lobby de Comunicaciones, propiedad del imputado Miguel Zorio, que también era proveedor del Instituto Nóos. Tal como informó ABC el pasado sábado , la Generalitat pagó ese dinero por estudios tan «sesudos» como «Qué es el fútbol. Reglamentación» , en el que se explicaba, entre otras cosas, que es un deporte que juegan dos equipos compuesto cada uno de ellos por diez jugadores de campo y un portero. El resto de documentos, hasta seis o siete del mismo nivel, versaban sobre planes de comunicación de federaciones.
«Corta y pega»
Una simple lectura de los informes, de pocas páginas, pone en evidencia que la información se sacó de internet y se incorporó al papel por el procedimiento del «corta y pega», como acredita el hecho de que, en ocasiones, aparecen seguidos dos párrafos idénticos. Pero es que además, los investigadores, que la semana pasada se desplazaron a Valencia, localizaron a dos empleadas de Lobby que admitieron haber elaborado los citados documentos en apenas una semana con información que sacaban de las páginas web de federaciones .
Isabel Villalonga reconoce que autorizó esos pagos, si bien justifica su decisión en que, al menos, sí existían físicamente los informes. Además, al no tener conocimientos de deporte, no supo calibrar si tenían algún interés o no. Tras dejar la Subsecretaría de Presidencia, Villalonga fue abogada general de la Generalitat de la Comunidad Valenciana y ahora ocupa un puesto en la Delegación del Gobierno.
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