Rifirrafe entre una exministra de Zapatero y Armengol con el 1-O como telón de fondo

El rifirrafe dialéctico se inicio a raíz de un tuit publicado por Trujillo el pasado sábado. «En Baleares venden una islita. ¿Y si la compran y se van allí con su independencia? Tendrían territorio, población y poder... y serían Estado», ironizaba la exministra en relación a los independentistas catalanes. La «islita» a la que hacía referencia es el islote menorquín de Colom, que desde hace algún tiempo se encuentra en venta. Su posible precio actual superaría en estos momentos los tres millones de euros .

Armengol respondió al tuit inicial de Trujillo un día después. «Argumenta sin ofender. Tus palabras no representan valores socialistas. Rectifica y discúlpate con los ciudadanos de Baleares», rezaba el mensaje de la mandataria balear.

Sin embargo, Trujillo no sólo no se ha disculpado, sino que ha criticado abiertamente a la líder socialista regional a traves de tres nuevos mensajes. «Menos representativo de los valores socialistas han sido tus idas y venidas con Patxi y Pedro», señala el primero de dichos mensajes, en referencia a la variable posición de Armengol en el marco de la crisis interna vivida por el PSOE a lo largo del último año. Armengol había sido uno de los apoyos más firmes de Pedro Sánchez en su primera etapa como secretario general. Con posterioridad, apoyó inicialmente la candidatura de Patxi López en las primarias socialistas, para, finalmente, volver a respaldar a Sánchez.

El segundo de los nuevos mensajes dirigidos por Trujillo a Armengol es igualmente contundente: «Y más ofensivo, si es verdad, es esto que publican los medios». La exministra hace referencia en ese segundo tuit a que, según se ha publicado en estos últimos meses, en 2013 Armengol suscribió una opción de compra, por valor de 3.000 euros, de un ático de lujo de un edificio que compró su pareja sentimental. La entonces líder de la oposición acabaría renunciando finalmente a la adquisición de dicho ático.

El último tuit, por ahora, de Trujillo en el marco de la citada polémica tiene un carácter conminatorio hacia su compañera de partido. «Gobierna y respeta mi opinión, que no ha sido ofensiva, sino una lección de teoría política aprovechando que hay otro islote en venta», afirma la exministra socialista.