Pumpido sigue dando pábulo a los asesinos de la T-4
La Fiscalía de Guipúzcoa ha formalizado su escrito de acusación contra cuatro de los 15 guardias civiles ya procesados por «maltratar» a los asesinos de la T-4, Igor Portu y Mattin Sarasola. Los dos etarras acusaban de torturas a todos estos agentes, que participaron ... en su detención y traslado.
En su escrito de acusación provisional, al que ha tenido acceso Efe, el Ministerio Público, que también imputa una falta de lesiones a otros seis agentes, destaca que los guardias actuaron «conmocionados» por el asesinato de los guardias civiles José Fernando Centeno y Fernando Trapero perpetrado por ETA en Capbreton (Francia) tan sólo unas semanas antes de la captura de Portu y Sarasola, asesinos de los ecuatorianos Carlos Alonso Palate y Diego Armando Estacio.
El fiscal pide tres años para dos de los agentes (un sargento y un cabo), dos años para otros dos (un cabo y un guardia), y diez días de localización permanente para los seis restantes (dos tenientes, tres cabos y un guardia), además de diversas compensaciones económicas, e inhabilitación en algunos de los casos.
Se da la circunstancia de que el propio ex jefe de ETA Garikoitz Aspiazu «Txeroki» reconoció que las torturas denunciadas por Portu eran falsas. Lo hizo en una carta incautada tras su detención en Francia, el 16 de noviembre de 2008. En el documento redactado en euskera -y hallado en el ordenador del domicilio donde fue arrestado-, «Txeroki» admite que «lo relacionado con las torturas falsas sufridas por Igor en manos del enemigo está en buen camino». En esa misma carta «Txeroki» anima a todos los etarras a que denuncien «siempre» torturas.
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