Peña Nieto afirma ante Dastis que ve un cambio en la actitud de Trump

Dastis, que se había trasladado a la residencia presidencial de Los Pinos nada más llegar a México para una visita oficial, permaneció reunido durante unos 45 minutos con Peña Nieto, en los que, según explicó después ante los periodistas, habían confirmado el deseo de estrechar los lazos entre España y México, cuando están a punto de cumplirse los cuarenta años del restablecimiento de relaciones bilaterales.

El ministro señaló, asimismo, que Peña Nieto se mostró muy agradecido por la solidaridad mostrada por España ante los anuncios de Trump que pueden afectar a la situación de México. Entre estos, se encuentran la amenaza de aumentar los aranceles a las exportaciones mexicanas o la construcción de un muro en la frontera para frenar la inmigración que llega desde suelo mexicano. El pasado 1 de febrero, el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, expresó ese apoyo, por teléfono a Peña Nieto

Ayer, según indicó Dastis, el mandatario mexicano no pidió a España ninguna acción en concreto y que el Gobierno español, por su parte, está «a la orden» de lo que quiera México, porque no pretende hacer nada que pueda interpretarse como una intromisión.

Señaló el ministro que los mexicanos quieren actuar «de manera prudente y cauta» para volver a la normalidad en la relación con Washington, ya que han detectado un «cambio de actitud» en la Administración Trump. Dastis manifestó también que cree que Estados Unidos intentará, antes que terminar con él, renegociar algunos aspectos del Nafta, el Tratado de Libre Comercio que tienen los dos países junto con Canadá.

Según el ministro, esta posición de apoyo a México no tiene porque tener consecuencias negativas en la relación con Estados Unidos, que sabe los estrechos lazos que tiene ese país con España.

Tampoco estima que las empresas españolas, que tiene fuertes inversiones en México vayan a verse afectadas por las posibles medidas de tipo comercial, ya que -indicó. La mayoría de ellas están enfocas hacia el mercado mexicano.

Algunas firmas españolas, no obstante, tienen una cierta preocupación por lo que pueda ocurrir, ya que parte de su producción en México va destinada a Estados Unidos. Ese seria el caso de importantes empresas de componentes de automoción, como el Grupo Antolín, que tiene ocho plantas de producción en México, o Gestamp, que cuenta con cuatro.