Investigan la muerte violenta de tres miembros de la misma familia en Pontevedra

Desde la Delegación del Gobierno indicaron a ABC que se estaba analizando la escena del crimen para recabar pruebas y descubrir cómo se sucedieron los hechos que desencadenaron las tres enigmáticas muertes. Aunque no se descarta ninguna hipótesis, los primeros indicios sí apuntan a que el hombre, de 56 años, pudo suicidarse . El fallecido, según pudo saber ABC, trabajaba en Suiza y estaba pasando unos días con la familia, muy conocida en la zona y asentada en la localidad desde hacía años. El matrimonio tenía un único hijo, mayor de edad, que convivía en el domicilio con la madre y su abuela. En el momento de los hechos se encontraba de fin de semana en Portugal con unos amigos y no regresó a la casa hasta entrada la noche.

Los investigadores han apuntado que «no hay indicios» de que haya «otra persona involucrada». Este lunes está prevista una inspección ocular por parte de la Policía Judicial de la Guardia Civil en el domicilio de los tres fallecidos. También la práctica de las autopsias de los cuerpos con el fin de «ver si arrojan alguna luz sobre el tema», según han indicado las mismas fuentes.

A la vivienda donde se produjeron las trágicas muertes se trasladaron a última hora numerosos vecinos alertados por la presencia policial. El alcalde de la localidad, también en el lugar, manifestó su incredulidad por lo sucedido. «Es una situación muy dura de asumir» , reconoció como portavoz de un pueblo conmocionado. Los desencadenantes del triple crimen son por el momento un enigma para los investigadores, que deberán aclarar en qué orden se sucedieron las muertes para determinar qué pasó. Algunas informaciones apuntaban a presuntos problemas maritales, pero no hay constancia de denuncias por malos tratos en la pareja.