Iberia cancela más de 40 vuelos y continúan las largas colas de viajeros

En un comunicado, la aerolínea lamentó que la supuesta huelga de celo que secunda parte de sus pilotos "dificulta la normalización" de la situación, pese al "esfuerzo" realizado por el resto de colectivos de la compañía.

La mayoría de las cancelaciones previstas se producirán en las vueltas a Madrid de vuelos que ayer no pudieron salir y, según la empresa, los pasajeros están siendo reubicados en otros vuelos de Iberia o de otras compañías, así como en autobuses y en el AVE.

Desde el viernes, Iberia ha alojado a más de 8. 000 personas en hoteles, ha contratado 25 vuelos con otras aerolíneas y ha reforzado su plantilla para contribuir a solucionar los problemas generados por el cierre del aeropuerto madrileño, con 300 nuevas contrataciones y 2. 000 empleados doblando turnos. Además, todas las salas Vip han permanecido abiertas 24 horas para acoger a los viajeros afectados y facilitarles la espera.

Se recuperará paulatinamente la normalidad

Desde primera hora de la mañana de hoy Barajas operaba ya en cuatro pistas y aseguraba que apenas se registraba retrasos, aunque todavía había colas de viajeros que no habían podido viajar en los últimos días, ya que desde el cierre del aeropuerto por la nieve el viernes se han cancelado más de 700 rutas.

Según detalló, durante la madrugada de hoy y primeras horas de la mañana despegaron los vuelos de largo radio que no salieron ayer por pase de actividad de las tripulaciones, como Buenos Aires, Lima, Montevideo, Bogotá y México.

"En esos casos, los pilotos renunciaron a viajar alegando que de haberlo hecho habrían superado el tiempo máximo de actividad, pese a podrían haber volado de acuerdo con la Ley de Navegación Aérea", afirmó la aerolínea, que señaló que esta actitud "dificultó la recuperación de la operación, con el consiguiente perjuicio para los clientes", a quienes la compañía reitera sus disculpas.

Fuentes aeroportuarias han confirmado que por el momento no ha habido incidentes destacables, aunque agentes de la Guardia Civil siguen desplegados por las terminales para evitar disturbios, después de que ayer miembros del instituto armado tuviera que entrar en tres aviones para desembarcar a los viajeros, al negarse éstos a abandonar la aeronave.