La defensa de Ibarretxe pide llegar «hasta el final» para demostrar su inocencia

La sesión histórica en el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco había comenzado con un ligero retraso, a las 09.44 horas. En el banquillo de los acusados estaba sentando el lehendakari y candidato a la reelección en las elecciones del 1 de marzo, Juan José Ibarretxe , y el líder de la oposición en el Parlamento de Vitoria y cabeza de cartel del PSE para los comicios autonómicos, Patxi López . Junto a ellos están procesados el también socialista Rodolfo Ares y los miembros de Batasuna Arnaldo Otegi, Olatz Dañobeitia, Pernando Barrena, Juan José Petrikorena y Rufi Etexeberria.

El lehendakari y los dos dirigentes socialistas están siendo juzgados por las reuniones que mantuvieron con miembros de Batasuna en 2006, durante el último alto el fuego de ETA. Las acusaciones populares (Foro Ermua y Dignidad y Justicia) les consideran cooperadores necesarios para la comisión de un delito de desobediencia por parte de los integrantes de la formación ilegal.

El primero que ha entrado en la sala ha sido Ibarretxe. Hasta la puerta de los juzgados le ha flanqueado la dirección del PNV. El presidente del Gobierno vasco, también primero en cruzar la puerta de entrada del Palacio de Justicia, ha tomado asiento a las 09.30 horas en uno de los dos banquillos habilitados para los ocho acusados, el colocado frente al Tribunal, a la derecha. Juanto a él, y tras estrecharse las manos, se han colocado Patxi López, y el secretario de Organización del PSE, Rodolfo Ares.

El ex portavoz de Batasuna, Arnaldo Otegi, ha sido el tercero en tomar asiento. Al cruzarse con Ibarretxe ambos se han saludado con un apretón de manos y han intercambiado unas palabras, en tono cordial. Los otros cuatro acusados de Batasuna, Olatz Dañobeitia, Pernando Barrena, Juan José Petrikorena y Rufi Etexeberria, que cumplen prisión en diversos centros penitenciarios, han sido conducidos al Palacio de Justicia desde las cárceles de Nanclares y Basauri, a las que fueron trasladados, previamente, con motivo de la celebración del juicio.

Los cuatro han sido los últimos en entrar en la Sala, donde se han estrechado en fuertes abrazos con Otegi. Los simpatizantes de Batasuna que se encontraban entre el público les han recibido con aplausos. Los cinco han ocupado el segundo de los banquillos de los acusados, situado frente al Tribunal, que preside el magistrado Manuel Díaz de Rábago y que está también integrado por Antón Subinas y Juan Carlos Benito-Butrón. Representa al Ministerio Fiscal la fiscal general del TSJPV, María Angeles Montes.

Entre el público se han colocado las esposas de Ibarretxe, López y Ares, así como la hija mayor del lehendakari, Eneritz. También han sido numerosos los dirigentes del PNV y cargos institucionales, como el ex presidente del Parlamento vasco Juan María Atutxa, el consejero vasco de Interior, Javier Balza, el ex lehendakari José Antonio Ardanza, el diputado general de Vizcaya, José Luis Bilbao, o el consejero de Justicia, Joseba Azkarraga.

En la sala estaba también el portavoz parlamentario del PSE, José Antonio Pastor, el secretario general de los socialistas alaveses, Txarli Prieto, el secretario de Organización del PSE en Vizcaya, Melchor Gil, el alcalde de Portugalete y miembro de la Ejecutiva, Mikel Torres, o el portavoz del PSE en Bilbao, Txema Oleaga.

Por parte de Batasuna figuraba entre el público el veterano dirigente de HB Tasio Erkizia, la secretaria general de LAB, Ainhoa Etxaide, el ex dirigente de este sindicato Rafa Díez, la mimbro de ANV Arantza Urkaregi, el ex representante de Batasuna Julen Aginako y la parlamentaria de EHAK Nekane Erauskin.

La Fiscal Superior de la Comunidad Autónoma Vasca, María Angeles Montes, ha reclamado al tribunal que dicte sentencia "poniendo fin a la presente causa por supuesta desobediencia por la reuniones con Batasuna". En una cuestión previa ha defendido que se acabe el procedimiento penal al considerar que "tal como el Tribunal Supremo afirmó en la sentencia del 'caso Botín', si la acusación particular o el Ministerio Fiscal no ejercen la acción penal, no puede procederse a la apertura de juicio oral sólo con las acusaciones populares". Lo mismo ha alegado la defensa de López y Ares.

La de Ibarretxe, sin embargo, ha renunciado al sobreseimiento de la causa al considerar que los acusados ya han cumplido "pena de banquillo", y buscará la absolución y la declaración de la inocencia del lehendakari. "Queremos demostrar, no sólo que la actuación del lehendakari fue legítima, sino la de todos".

El Foro de Ermua ha solicitado, como cuestión previa, que se admita la petición de una comisión rogatoria para que las autoridades de Suiza colaboren y pongan a disposición del tribunal las actas de las negociaciones mantenidas por ETA y el Gobierno, custodiadas por el centro Henri Dunant.

La causa, se archive o no tras las peticiones de las defensas, o acabe en absolución para los procesados, está abocada a que sea resuelta, finalmente, en el Tribunal Supremo, ya que las acusaciones populares, ejercidas por el Foro de Ermua y la asociación Dignidad y Justicia, recurrirán al alto tribunal.

El lehendakari y los dos dirigentes del PSE son juzgados por las reuniones que mantuvieron con dirigentes de Batasuna en 2006, durante el último alto el fuego de ETA. Por esos contactos, las acusaciones particulares piden una pena de dos años para Ibarretxe, que Foro Ermua incrementa en otros nueve meses, y de un año para López y Ares. Para Arnaldo Otegi solicitan tres y cuatro años (en el segundo caso, el Foro Ermua); para Rufi Etxeberria y Juan José Petrikorena piden dos años de cárcel y para Olatz Dañobeitia y Pernando Barrena un año.

En cambio, el Ministerio Fiscal y las defensas reclaman la libre absolución por considerar que celebrando las reuniones no se cometió delito alguno ya que no había una orden expresa que prohibiera esos encuentros.

El juicio ha comenzado con la constitución del tribunal, a las 9:44 horas, y tras la lectura de los informes de las partes ha llegado el momento del planteamiento de las cuestiones previas. Resueltas éstas, la vista ha quedado suspendida hasta el lunes, cuando declararán los ocho imputados. Según fuentes cercanas al caso, el orden de declaración es el siguiente: Arnaldo Otegi, Rufi Etxeberria, Pernando Barrena, Juan José Petrikorena, Olatz Dañobeitia, Juan José Ibarretxe, Patxi López y Rodolfo Ares.

El juicio se celebra en horario de mañana y tarde, de lunes a jueves. Sólo si se acumulan retrasos en la vista habrá sesión los viernes. El martes 13 llegará el testimonio de los periodistas que cubrieron las reuniones.

Al día siguiente será el turno de los testigos políticos, con citaciones a numerosos dirigentes políticos vascos como Iñigo Urkullu (PNV), Unai Ziarreta (EA), además de Joseba Egibar (PNV), Miren Azkarate (portavoz del Gobierno vasco), Javier Madrazo (EB) y Josu Jon Imaz (ex presidente del PNV). El mismo día también acudirán como testigos los máximos dirigentes actuales y anteriores de los sindicatos ELA y LAB, Adolfo Muñoz, José Elorrieta, Rafa Díez Usabiaga y Ainhoa Etxaide.

El jueves, día 15, acudirán como testigos varios expertos extranjeros, llamados por la defensa del lehendakari y por la de Batasuna, como el premio Nobel Alfredo Pérez Esquivel, el sacerdote irlandés Alec Reid, el sudafricano Roelf Meyer y el ex presidente italiano Francesco Cossiga. Para la semana siguiente, en concreto para el lunes 19, están convocados el ex secretario general de Presidencia con Aznar, Javier Zarzalejos, y el presidente del PSE-EE, Jesús Eguiguren.

También se ha reclamado el testimonio del presidente Rodríguez Zapatero, del ex presidente José María Aznar y del ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, pero los tres se acogerán a su derecho a declarar por escrito y no acudirán a Bilbao. El presidente del tribunal ha informado de que todavía no se ha dado traslado al TSJPV de estas declaraciones escritas.

Los días 19 y 20 estarán dedicados a los peritos, y los dos últimos, 21 y 22, a las conclusiones de las partes.