El constitucionalismo saldrá a la calle el domingo en Barcelona para reclamar «sensatez»

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La convocatoria se produce después de que Societat Civil, en aras de no caldear más el ambiente en la calle, renunciase a organizar una marcha el sábado día 30, en la previa de la celebración del referéndum ilegal del 1-O .

Ahora, y tras los acontecimientos de los últimos días, la entidad que preside Mariano Gomà considera que «ha llegado el momento de que la mayoría silenciosa que vive en Cataluña pueda salir a la calle para expresarse de forma pacífica y cívica». El objetivo, decir «sí a la convivencia, sí al pluralismo y sí a la solidaridad».

La pretensión de SCC es armar una respuesta unitaria por parte de la sociedad catalana contraria al proceso soberanista, más allá de siglas de partidos y posicionamientos ideológicos, un anhelo que no se ha demostrado fácil en los últimos años, marcados por la fragmentación del frente constitucionalista . En contraste, el soberanismo ha demostrado una capacidad de movilización que en buena forma ha sido el motor del proceso.

De inicio, y siguiendo el recorrido habitual de otras manifestaciones de los contrarios al independentismo, la pretensión inicial de SCC era iniciar la concentración en plaza Urquinaona, llenar el tramo inicial de Vía Layetana para acabar confluyendo en plaza Sant Jaume, sede del poder institucional en Cataluña. No obstante, y según señalan a ABC fuentes de la entidad, el número de adhesiones logradas y la previsión de una asistencia muy importante -con gente de toda Cataluña, y también del resto de España- ha llevado a reconsiderar el recorrido. Así, se descarta concluir en plaza Sant Jaume, y completar en cambio el recorrido de Vía Layetana.

En función de las previsiones de asistencia, se contempla la posibilidad de ampliar el recorrido y que este incluya el paseo de Isabel II , para acabar a las puertas del parque de la Ciudadela. Esta última posibilidad, sin embargo, sigue en el aire, entre otras cosas porque esta movilización podría coincidir con otra anunciada por el independentismo, que ha apuntado en alguna ocasión la pretensión de una acampada en la Ciudadela -sede del Parlament- para presionar a favor de la declaración unilateral (DUI), tal y como ayer se recordó desde la CUP.

En cualquier caso, el constitucionalismo tiene claro que es necesario romper, tanto de puertas adentro, como sobre todo de cara al exterior, la imagen hegemónica de un soberanismo hipermovilizado que se ha adueñado de la calle.

«Tenemos que enseñar que en Cataluña no solo hay ciudadanos secesionistas, sino que también vive una gran parte de catalanes que están a favor de la convivencia, la democracia y la permanencia de Cataluña en España », apunta la entidad.

Tanto desde Cs como desde el PP se hizo un llamamiento a la participación. Por el momento, el PSC no se suma a la marcha. «Llamamos a la movilización social , a salir a la calle, a todos los catalanes de bien que no están de acuerdo con el proceso rupturista, para que salgan a defender la libertad, la democracia y la dignidad. Llamamos a participar de manera masiva», apuntó ayer García Albiol.

Con esta marcha, SCC recuerda además que «más del 60% de los catalanes» no quiere la secesión y que estos lo demostraron «con su no participación en las consultas independentistas», a pesar de la «intoxicación informativa de la Generalitat y entidades afines subvencionadas».