El calvario judicial de Matas continúa

Cabe recordar que en el denominado caso Palma Arena se investigaba, originariamente, el presunto sobrecoste de las obras del velódromo del mismo nombre, inaugurado en marzo de 2007 por Matas. La causa fue instruida en su momento por el anterior titular del Juzgado de Instrucción número 3 de Palma, José Castro . Con el tiempo, dicha causa llegaría a contar con un total de 28 piezas separadas, incluido el caso Nóos. Tras jubilarse Castro en diciembre de 2017, Mora pasó a ser la instructora. Por lo que respecta a la pieza separada número 16, gira en torno al presunto fraccionamiento irregular de contratos y al supuesto cobro de comisiones en la construcción del velódromo.

La magistrada ha decretado ahora la apertura de juicio oral no sólo contra Matas, sino también contra tres personas más. En concreto, el exdirector general de Deportes José Luis «Pepote» Ballester, como supuesto autor de un delito continuado de fraude a la Administración y otro continuado de prevaricación; la exsecretaria general técnica del Govern Jane King, por los mismos supuestos delitos, y el exgerente del Consorcio Palma Arena Jorge Moisés, como presunto autor de los delitos de cohecho, falsedad documental, malversación de caudales públicos y prevaricación.

Según indica la juez en su auto, «existen indicios sólidos y serios suficientes de responsabilidad criminal» contra todos los acusados. La magistrada ha ordenado, además, que se forme una pieza de responsabilidades pecuniarias , requiriendo a los acusados para que presten una fianza solidaria, que en el caso de Matas es de 93.289,84 euros. En caso de que las fianzas establecidas no se abonen en el plazo de veinticuatro horas, se procederá al embargo de bienes en cuantía suficiente hasta cubrir la suma fijada.

Cabe recordar que hace apenas dos semanas la Audiencia Provincial de Baleares había absuelto a Matas en el marco de otro proceso judicial . Así, la Sala había absuelto al expolítico mallorquín de los delitos de prevaricación, malversación y falsedad en documento mercantil de los que venía siendo acusado por la Fiscalía y la Comunidad Autónoma en una pieza derivada del denominado caso Turismo Joven. En esta causa se investigaba originariamente el presunto desvío de fondos públicos en el Consorcio de Turismo Joven durante la legislatura 2003-2007.

A partir de ahí, se abrió una pieza separada después de que un condenado en la citada causa hubiera apuntado que Matas habría dado la orden de pagar 108.000 euros a un exconcejal del PP del municipio mallorquín de Calviá, Jesús García Oeo, con facturas falsas. El juicio de esta pieza separada del caso Turismo Joven se celebró el pasado mes de marzo. El abogado de Matas, José Zaforteza, había solicitado la libre absolución de su cliente, quien durante la vista negó además haber cometido cualquier posible irregularidad. Por su parte, el Ministerio Público solicitaba cinco años de cárcel para el exmandatario balear.

Tras ese juicio, se creía que en los próximos meses Matas ya sólo debería sentarse una vez más en el banquillo, en concreto, en el juicio del denominado caso Son Espases. En dicha causa se investigaron las presuntas irregularidades que se habrían cometido en 2006 a lo largo del proceso de adjudicación de las obras del Hospital de Son Espases, ubicado en Palma de Mallorca. Con la resolución hecha pública ahora por la magistrada Mora, se constata que como mínimo aún le quedan dos juicios a Matas.

Desde junio del pasado año, Matas está cumpliendo en el centro penitenciario de la localidad madrileña de Aranjuez la pena de tres años y ocho meses de cárcel que le fue impuesta por el tribunal del caso Nóos por prevaricación, falsedad y fraude. Esta es la segunda pena de prisión que está cumpliendo el antiguo dirigente del PP balear, después de haber ingresado en la cárcel por vez primera en julio de 2014. En aquella ocasión, Matas cumplió una condena de nueve meses y un día en la prisión de Segovia por tráfico de influencias, en el marco de otra de las piezas separadas del caso Palma Arena, en concreto, por favorecer a un amigo periodista con una subvención.