Aznar: «Somos el único gran partido que cree en España»

El que fuera líder del PP, en un duro discurso, ha afirmado que «somos el único gran partido que cree en España y que está comprometido con su futuro». También, que la recuperación «no vendrá de un socialismo que busca seguir engañando a todo el mundo todo el tiempo, ni de un socialismo a la desesperada que ahora se disfraza de reformismo y que confunde reformas con recortes». Convencidos de que «los mejores tiempos están por venir y vendrán», ha defendido la necesidad de que España «vuelva a ser una de las mejores democracias del mundo» y para ello, el PP se dirige a todos«los que quieran trabajar con nosotros para mejorar España».

Al hilo de esta reflexión ha defendido que PP y PSOE no son iguales ni, siquiera, en sus errores , porque el PP, a su juicio, «trabaja para hacer España más fuerte y los que están ahora se han ocupado a conciencia de dejar a España mucho más débil». En un discurso nacional dirigido fundamentalmente a la cita electoral del año que viene, ha agregado que «son muchos los millones de españoles que desean que las encuestas se queden cortas» de forma que el mandato que consiga el PP sea amplio y claro ante un cambio político «que el país ya reclama».

«Hasta los socialistas lo saben aunque no quieran reconocerlo. Y en vez de mirar de frente a los problemas se entretienen con debates sobre quién sabe cuándo se irá, o si se irá o no se irá quien tendría que haberse ido ya. Pero la situación no está para bromas ni para pinganillos» , ha añadido haciendo referencia tanto al debate en torno a la continuidad de Zapatero como al uso de la traducción simultánea en el Senado, criticada por no pocos socialistas.

Tras propugnar que España no puede ser gobernada en función de territorios , ni de privilegios, ni de intereses particulares, ha replicado al PSOE que «los únicos que han hecho todo lo posible para destruir el modelo autonómico han sido los socialistas, con el presidente del Gobierno a la cabeza», en respuesta a la polémica abierta por el pasado viernes en León sobre el carácter residual del Estado y su inviabilidad.

Así, tras acusar a los socialistas de haber intentando cambiar la Constitución «por la puerta de atrás» con el Estatuto de Cataluña o de buscar al exclusión del PP con el pacto del Tinell —«se afanaron tanto en construir trincheras y en estigmatizar a todo lo que pudiera sonar cercano al PP que se olvidaron de gobernar», dice— ha señalado que ahora le corresponde al PP «recuperar el estado de las autonomías plasmado en nuestra Constitución; una nación que tendrá que trabajar para fortalecer lo que nos une».

«Tendremos que trabajar, y trabajar muy duro, para recuperar la unidad y la concordia. Sin revanchas, sin trincheras, sin fracturas y sin intentar ajustar cuentas pendientes», ha proclamado entre los aplausos de los dirigentes y cuadros populares que se han dado cita en Sevilla. En definitiva, «España necesita un presidente reformista, no un transformista de la política; necesita un gobierno del PP presidido por Rajoy» de modo que «los mejores tiempos para España están por venir. Y vendrán».

Con el inconfundible sabor de las grandes citas electorales, también la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, ha hablado de las legislativas al afirmar que estamos en una legislatura «en prórroga, en tiempo de descuento» frente a un PP «preparado para tomar la alternativa, estamos dispuestos porque tenemos al mejor: Mariano Rajoy».