El PNV cree que no beneficia sobreexponer los encuentros entre víctimas y presos

En una tertulia de Radio Euskadi, recogida por Europa Press, el secretario general del PSE-EE de Álava, Txarli Prieto, ha defendido, por su parte, que es necesaria «una exposición pública», ya que «la cobardía no se puede socializar y sería cobarde el ir tapando y escondiendo lo que ha pasado durante décadas».

Tras recordar que ha habido encuentros entre víctimas de distintas violencias durante cinco años «sin que nadie haya proyectado nada a los medios de comunicación», Joseba Egibar ha manifestado que estos encuentros «no conseguirán sanar las heridas del conjunto de la sociedad, pero sí han aportado una serie de pautas de comportamiento en un escenario en que ha habido violencia destructiva».

«Me extraña la proyección pública que está teniendo. Esta sobreeexposición que se está teniendo no beneficia. Difícilmente va a beneficiar al victimario que siente la necesidad de pedir perdón y se va a encontrar que si lo hace no ante la víctima sino ante el conjunto de la sociedad no sé qué efecto restaurador va a tener», ha indicado. A su juicio, estas «incursiones» como la de Consuelo Ordóñez tienen «otra intención», como es «el intento de desmantelar una determinada política». «El PP, de forma querida o con desorientación, está permitiendo estas situaciones que no van a ser positivas» , ha añadido.

Por su parte, el dirigente socialista Txarli Prieto ha subrayado que estos encuentros, «con independencia del resultado», son un ejercicio de generosidad por las víctimas, ya que «se ponen delante de quien les ha hecho un daño irreparable para demostrarles que, por encima del daño, quienes tienen esa prevalencia democrática son las víctimas y esto tiene un elemento ejemplarizante».

«Facilitar a quienes no han sido demócratas que vean que existe la democracia es una forma de quitarles el pasamontañas. Me parece bien que sea público porque los asesinatos fueron públicos, ante la mirada de toda la sociedad y la reinserción, debe ser ante la mirada de toda la sociedad», ha añadido. Tras reconocer que está de acuerdo con la discreción «para las víctimas que lo quieran, pero no como concepto», ha lamentado que se dé en ocasiones «una intencionalidad como la que querer tapar el horror que ha habido durante tanto tiempo».

«Esto necesita una exposición pública, la cobardía no se puede socializar y sería cobarde el ir tapando y escondiendo lo que ha pasado durante décadas. Ordóñez tiene todo el derecho a saber, dudar y poner a prueba al asesino y contarlo si le parece bien. También tiene derecho a exigir cosas», ha incidido. PP Por su parte, el parlamentario del PP Carmelo Barrio ha valorado que Consuelo Ordóñez es una mujer «sincera, clara y valiente» y ha incidido en que «las víctimas siempre tienen la razón».

«Ordóñez quiere hacer preguntas al asesino de su hermano y las quiere compartir », ha señalado, para añadir que busca «conocer algunas de las claves de los asesinos que no salen en los juicios ni en algunas poses que hemos visto últimamente». Por su parte, el parlamentario de Aralar Dani Maeztu ha valorado los encuentros "desde un punto de vista íntimo y privado, fuera del derecho Penal, siendo un tema personal y voluntario», pero ha reconocido que «me cuesta más entender esta última fase de encuentros con todo el bombo mediático y queriendo hacerlo para poner en solfa lo que se estaba haciendo». «Entonces ya no es algo del ámbito íntimo y personal sino que va con otras connotaciones que no las entiendo», ha añadido.