Abascal reclama «deportaciones masivas» y ataca al PP con la inmigración desde Salt

«Deportaciones masivas, eso es lo que España y Cataluña necesita», ha reclamado el líder de la formación ante la atenta mirada de una parte de la comunidad magrebí que aquí reside. Vox está incidiendo más si cabe en el discurso antiinmigración y trata de atacar al Partido Popular con él. «Feijóo debería dejar los saloncitos y pisar la calle. Todos menos Vox votan a favor de regularizar a 500.000 inmigrantes irregulares«, ha denunciado en esa línea en referencia a la iniciativa legislativa popular, cuyo trámite de toma en consideración aprobó el Congreso de los Diputados hace algunas semanas. No sólo los partidos estarían detrás del plan para fomentar la inmigración e incorporarla al mercado laboral. Abascal también ha apuntado contra instituciones como el Banco de España o la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), con la que le «gusta reunirse a Feijóo».

Común entre sus planteamientos, ahora, en el contexto de las catalanas, este posicionamiento duro contra la población extranjera encuentra un competidor dentro del espectro independentista. Es el partido Aliança Catalana, de Silvia Orriols, que estará mañana en un acto de campaña en Girona, donde es cabeza de lista y espera sacar representación en el Parlament por primera vez en su historia.

Ambas formaciones coinciden en vincular las llegadas irregulares con la supuesta inseguridad que viven distintos municipios dentro de Cataluña y piden retirar las ayudas sociales a los recién llegados. «Que Cataluña no se convierta en Arabia», ha afirmado Garriga antes de Abascal para reclamar el voto de los asistentes. Este último insistía: «Dicen que queremos fronteras cerradas, pero es para tener las puertas de casa abiertas».

Dentro de esta estrategia de pulsar el descontento con el foráneo para hacerse con el voto dentro de la derecha constitucionalista, Vox vuelve a elegir Salt, una localidad que cuenta con una población de 33.337 personas de las cuales 12.590 son de origen extranjero. Así, no es la primera vez que el autobús de campaña de Vox para en esta zona de la provincia de Gerona. Ya lo hizo durante las últimas elecciones autonómicas en 2021, cuando los representantes del partido recibieron el lanzamiento de objetos a su llegada. «Estaban los yihadistas gritando viva Mohammed VI y 'allahu akbar'», ha apuntado con sorna Abascal desde la tribuna recordando el momento.

Más allá de las elecciones catalanas, Santiago Abascal ha comentado la última polémica del PSOE con el Gobierno de Argentina, con el que el ministro de Transportes, Óscar Puente, ha abierto una crisis diplomática tras sugerir que Javier Milei, su presidente, podría «ingerir sustancias».

Unas declaraciones que han tenido contestación por parte de Milei, que ha afirmado que el PSOE tiene otras cuestiones de las que preocuparse, haciendo referencia a los presuntos casos de corrupción que afectan a la mujer de Pedro Sánchez, Begoña Gómez. Abascal, ha defendido a Milei ante unas acusaciones que considera de una «gravedad extrema» y ve la respuesta del líder del partido 'La Libertad Avanza' como «moderada».

«Parece que el Gobierno le ha cogido el gusto a los lloriqueos», ha dicho el líder de Vox en referencia a la polémica y a los cinco días de reflexión que se tomó la semana pasada Sánchez para, al final, anunciar que sigue al frente del Ejecutivo después de ponerlo en duda. «Ahora les escandaliza que la oficina del presidente de Argentina le haya tenido que recordar la supuesta corrupción del entorno del presidente del Gobierno», ha añadido.