Ana Botella no será candidata a la Alcaldía de Madrid

De hecho, su equipo ha apuntado que la decisión estaba tomada "hace meses" y que sólo la conocía su familia, aunque se la transmitió a Rajoy a principios de septiembre y esta misma mañana se la ha reiterado en un encuentro que han mantenido.

Botella ha leído un comunicado en el que ha recordado que empezó su actividad política municipal hace once años, tras ser elegida concejal por primera vez en 2003. Una función que siguió ejerciendo, en distintas responsabilidades de gobierno, hasta que asumió la Alcaldía. "Hoy, después de tres mandatos, quiero anunciarles mi decisión de no concurrir a las elecciones municipales del próximo año. Esta mañana he reiterado mi decisión al presidente del Gobierno y del partido, Mariano Rajoy, y le he reiterado mi compromiso más firme con las responsabilidades que tenemos encomendadas hasta el final de la legislatura", ha detallado.

Botella, que ha realizado el anuncio con el "sentir del deber cumplido", da así "por cerrada una etapa" muy importante de su vida pero ha puntualizado que ésta "no es una despedida", ya que su equipo tiene por delante "muchos meses de trabajo y proyectos que culminar". "Lo seguiremos haciendo con la misma entrega y entusiasmo que hemos puesto siempre y pondremos hasta el último día de nuestro compromiso con los madrileños", ha remachado.

De esta forma, la esposa del expresidente José María Aznar seguirá ejerciendo su puesto hasta el final del mandato, momento en el que, ha remarcado, podrá ofrecer a los madrileños un balance del gran "esfuerzo" hecho para superar la crisis preservando la cohesión social, los servicios públicos, las condiciones para encarar la recuperación y el empleo.

La primera edil ha aprovechado su intervención para enfatizar que sigue "comprometida con el proyecto del Partido Popular de Madrid", formación que seguirá contando con su apoyo. Se ha mostrado convencida asimismo de que el PP "empeñará sus mejores esfuerzos para conseguir la opción de ser capaz de renovar la generosa confianza que los madrileños han otorgado durante tanto tiempo". Cree que así se seguirá construyendo un Madrid "abierto e integrado" sobre las bases asentadas en los últimos años "a pesar de las circunstancias adversas".

Ana Botella se convirtió en alcaldesa de la capital el 27 de diciembre de 2011, después de que el por entonces regidor, Alberto Ruiz-Gallardón, abandonase el cargo para convertirse en ministro de Justicia. Era la primera mujer en ocupar el puesto en toda la historia de la capital.

Desde entonces, Botella ha visto cómo uno de sus grandes objetivos, lograr la designación de Madrid para los Juegos Olímpicos de 2020, un reto que heredó de su predecesor en el cargo, quedaba frustrado en beneficio de Tokio. El varapalo final al proyecto se produjo en Buenos Aires (Argentina), después de que la regidora invitase a los oyentes en su discurso a tomarse "a relaxing cup of café con leche in la Plaza Mayor", frase que fue ampliamente parodiada.

Su gestión ha estado también marcada por la tragedia ocurrida en el Madrid Arena el 1 de noviembre de 2012, que se saldó con cinco víctimas mortales a causa de una avalancha motivada por la superación del aforo del recinto durante una fiesta de Halloween y críticas sobre la gestión que del suceso realizó el Ayuntamiento de Madrid.

Y tuvo que hacer frente a una huelga de limpieza que durante doce días inundó de basura las calles de Madrid y que finalizó con un acuerdo entre empresas y sindicatos, según el cual se mantendría el empleo de todos los trabajadores, a cambio de ejecutar un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) de 45 días de suspensión de empleo al año por empleado hasta el 2017.

Comunicada su decisión de no concurrir a las próximas elecciones municipales, Botella ha visto cómo una de las que han sonado en los últimos días para encabezar la lista del PP, Esperanza Aguirre, decía de ella en Twitter que "siempre ha hecho lo mejor para el PP".

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Aguirre, que siempre ha recalcado que no hace "planes" ni "estrategias" y que siempre se ha dejado llevar por la "divina providencia", manifestó ayer mismo que Botella podía ser una "excelente candidata", si bien añadió que también lo podía ser la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría. "(Sáenz de Santamaría) me parecerá una excelente candidata, como lo es Ana Botella y muchos otros miembros del PP de Madrid", apuntó.

Otra figura del PP, su vicesecretario general de Política Autonómica y Local, Javier Arenas, ha atribuido el anuncio de Botella a una decisión "personal" y ha asegurado que el Ayuntamiento de la capital tendrá "una gran candidatura" en 2015. Arenas ha expresado su "afecto y profundo respeto" por la decisión de la alcaldesa madrileña y ha puesto en valor su gestión económica al frente del consistorio. "Ha sido, es y será una persona profundamente leal al partido y sus ideas", ha agregado. Interrogado sobre el próximo candidato a la Alcaldía, Arenas ha recordado que Rajoy ya dijo que no había fecha para esa decisión y ha asegurado que, "sin ninguna duda", el PP tendrá "una gran candidatura" en la capital.

Menos complaciente ha sido la secretaria de Organización del PSM, Maru Menéndez, quien ha opinado que la decisión de Botella era "casi un grito unánime de los ciudadanos madrileños" debido su "gestión plagada de escándalos y hechos muy dramáticos" y a su "desidia" y "clarísimas deficiencias". Menéndez ha lamentado que el PP haya "sometido a la ciudad de Madrid durante más de tres años a un escenario de pérdida de oportunidades manteniendo al frente de la Alcaldía a la señora Botella". "El PP como siempre llega tarde porque hemos perdido los madrileños unos años preciosos en la lucha contra la crisis para haber hecho de Madrid la ciudad que debe ser, la ciudad de las oportunidades, una ciudad que debe tirar de España de la región", ha argumentado.

Por su parte, el grupo municipal de IU ha señalado que la decisión de Botella no tendrá efectos en la política del PP en Madrid, ya que, ha sostenido, el partido nombrará a otro candidato que llevará a cabo "políticas muy parecidas". "A IU lo que le importa es el modelo político, la contraposición del modelo del PP con el de IU", ha mantenido.

Mientras tanto, la portavoz de UPyD en el Congreso, Rosa Díez, cree que la decisión de Botella pone de relieve "la absoluta falta de respeto" del PP por no contar con los ciudadanos: "el PP la puso y el PP la echa", ha subrayado. "Estamos con una alcaldesa que no fue elegida por los ciudadanos y que no se va porque los ciudadanos la echan", ha lamentado en los pasillos del Congreso.