Hasta 600.000 euros de sanción por rodear el Congreso

La futura ley contempla sanciones de hasta 600.000 euros para infracciones muy graves , como el uso de imágenes de agentes de la autoridad, encargados de velar por el pacífico y libre derecho de reunión, que puedan poner en peligro su seguridad o el éxito de la operación.

Todas aquellas faltas que se eliminan del Código Penal pasarán a ser consideradas como infracciones administrativas. Las leves prevén sanciones que oscilan entre 100 y 1.000 euros. Las graves, entre 1.001 y 30.000 euros. Por último, las infracciones muy graves serán sancionadas con entre 30.001 y 600.000 euros. Los delegados del Gobierno solo podrán castigar las infracciones leves y graves. El secretario de Estado de Seguridad tiene potestad para imponer multas de hasta 300.000 y el ministro del Interior, de 300.001 a los 600.000 euros.

En la memoria de todos están determinadas actuaciones protagonizadas por movimientos ciudadanos surgidos a raíz del 25-M, en torno al Congreso de los Diputados . Los jueces entendieron que no había habido conductas delictivas. Ahora, acosos de este tipo, también al Senado y a asambleas legislativas autonómicas, podrían ser infracciones muy graves en la nueva Ley.

La vigente Ley, de 1992, la impulsó el entonces ministro del Interior José Luis Cocuera, aquel de «la patada en la puerta». Fuentes del Departamento que ahora dirige Jorge Fernández Díaz creen que, aunque «no era mala», urge adaptar la legislación a un nuevo contexto en el que han irrumpido comportamientos que atentan contra los derechos y libertades de los ciudadanos.

Para elaborar el proyecto se ha tenido en cuenta el criterio de los profesionales de la Policía y la Guardia Civil, pero también el de asociaciones de vecinos y el Defensor del Pueblo, como en el caso de los cacheos para descartar toda discriminación en razón de sexo, nacionalidad.... A fin de garantizar la tranquilidad ciudadana, los agentes podrán establecer zonas de seguridad. También en carreteras y autopistas. Antes ya se hacía por la vía de los hechos. Pero con motivo de los «escraches» a políticos del PP se originó una polémica. Con la nueva Ley se dará a las Fuerzas de Seguridad una herramienta que deberá ser aplicada en cada caso de manera proporcional a los hechos, ya que no se precisan distancias.

Se contemplan también como infracciones muy graves, siempre que no sean delitos, la intrusión en determinados recintos , como centrales nucleares; la exaltación del ocio o el racismo; la ofensa con trajes a símbolos del Estado (parodias de Alsasua), o usar capuchas en alteraciones del orden público.