William Hague denuncia la «conducta agresiva» de la Guardia Civil en la Verja

«Gente que cruzaba la frontera ha denunciado la conducta agresiva de los equipos de la Guardia Civil traídos de otras partes de España para reforzar los controles», explica el ministro en su declaración [puedes leer aquí el texto en inglés]. Además, Hague se hace eco de «informaciones inquietantes de coches con matrículas de Gibraltar quemados o atacados en España». Y destaca también que «hemos visto ambulancias revisadas en esos controles».

El responsable de la diplomacia británica denuncia en su texto los incidentes en la frontera gibraltareña en las últimas semanas, entre las que incluye la prohibición de transportar «materiales de construcción esenciales». Hague se refiere a la decisión española de cortar temporalmente las exportaciones de rocas y arena a la colonia británica tras la construcción de dos espigones –como denunciaba ABC este verano– para proteger lo que España cree que será una futura urbanización de lujo en terrenos ganados al mar en Sandy Bay , en la cara oriental de la colonia.

«Impacto en proyectos de infraestructuras»

Las ventas de arena, grava y roca para la construcción desde España a Gibraltar se han disparado desde el año 2010, según Hacienda. Según Hague, la interrupción de este flujo – casi un millón de toneladas de estos materiales en los últimos tres años y medio – «está teniendo ya un impacto en proyectos de infraestructuras». La Comisión Europea, que enviará una misión de observadores este mes, investigará si esos rellenos en el mar son compatibles con la legislación europea.

«Estas medidas son desproporcionadas y responden obviamente a una motivación política», denuncia Hague , «al haber sido introducidas después de la creación legal por el Gobierno de Gibraltar de un arrecife artificial en las Aguas Territoriales del Gibraltar Británico [en mayúsculas en el texto original]». El ministro considera que la construcción del arrecife «es compatible con las mejores prácticas internacionales y con el propio enfoque del Gobierno español a los arrecifes artificiales».

«Compromiso firme» con el Foro Trilateral

El gobierno español, por su parte, considera que el lanzamiento de bloques de hormigón para construir ese arrecife –con finalidades ecológicas según las autoridades del Peñón– es ilegal, y ha denunciado lo que califica como « vertido incontrolado de hormigón» a la Fiscalía de Medio Ambiente.

A la vista de la tensión en la frontera, y de los retrasos que, como recuerda Hague, afectan a miles de trabajadores españoles que cruzan la Verja cada día, el político «tory» concluye reiterando la llamada a una «solución diplomática» a la situación que transmitió el pasado 7 de agosto a su homólogo español, José Manuel García-Margallo, y su oferta a crear grupos de trabajo ad hoc sobre cuestiones específicas relacionadas con la pesca o el medio ambiente.

En estos grupos estarían presentes representantes del Peñón y del Campo de Gibraltar. Pero España, por su parte, ha denunciado que no se han puesto en marcha todavía. Las diferencias de diagnóstico, en todo caso, son de un calibre mayor en lo que se refiere al foro en el que debe abrirse esa vía diplomática.

Así, Hague aprovecha el comunicado al parlamento para reafirmar que el gobierno que preside David Cameron, quien recibió este viernes al ministro principal de la colonia, Fabian Picardo , está «plenamente comprometido con el Foro Trilateral de Diálogo entre Reino Unido, Gibraltar y España», lanzado por el anterior ministro socialista, Miguel Ángel Moratinos. Un foro tripartido que el actual responsable de la estrategia española, García-Margallo, daba por muerto en una entrevista en ABC a comienzos del mes de agosto.