El Rey recibe por separado a González, Aznar y Zapatero

Don Juan Carlos se reunió con los tres expresidentes en su despacho del Palacio de La Zarzuela, pero la Casa del Rey no informó puntualmente a la prensa de estos encuentros porque forman parte de las «audiencias privadas» del Monarca . Dentro de estos encuentros, el Rey también recibió al líder de la oposición, Alfredo Pérez Rubalcaba, como informó ABC en su día.

De forma habitual, el Rey se reúne con distintos políticos, empresarios y representantes de los diferentes sectores de la sociedad con el fin de estar informado de la actualidad española y conocer distintas opiniones. Entre las personas que acuden periódicamente a Zarzuela están el banquero Emilio Botín (Santander), el empresario César Alierta (Telefónica), el editor José Manuel Lara (Planeta) y el filólogo Víctor García de la Concha (Instituto Cervantes).

El Monarca recibió a alguno de los expresidentes del Gobierno antes de la operación de hernia discal a la que se sometió el pasado 3 de marzo, y a los demás después. De hecho, Don Juan Carlos retomó estas audiencias privadas quince días después de salir del quirófano, según informó entonces el Palacio de La Zarzuela.

Lo que más le preocupa

Aunque el contenido de las conversaciones del Rey con los políticos no ha trascendido , lo que sí se sabe es que Don Juan Carlos ha abordado con sus interlocutores los dos asuntos que más preocupan: la situación política y económica. Y que el Monarca ha intentado en estos encuentros «propiciar acuerdos» sobre los grandes asuntos en estos momentos de extrema dificultad.

De esta forma, el Monarca no sólo defiende su convencimiento personal, tantas veces reiterado en público y en privado, de que «solo superaremos las dificultades actuales actuando unidos, remando a la vez» , sino que también traslada a los políticos el deseo expresado por los ciudadanos en las encuestas de opinión sobre la necesidad de llegar a acuerdos.

Y es que, desde que estalló la crisis económica, Don Juan Carlos no ha cesado en su empeño de propiciar acuerdos. Su primer llamamiento público lo hizo en noviembre de 2008 en Bilbao, cuando afirmó que la superación de la crisis «más allá de los instrumentos y reformas que se adopten, implica el esfuerzo de todos, de los poderes públicos, de los operadores económicos, de los agentes sociales y de la sociedad en su conjunto». Desde entonces, no ha dejado pasar una oportunidad para promover esa unidad , desde el respeto más escrupuloso a su condición de Rey constitucional.

Como Jefe del Estado

Como explicó el propio Don Juan Carlos en el Mensaje de Navidad de 2011, « a mí me corresponde, como Jefe del Estado , animar a esas instancias a trabajar sumando voluntades, no restándolas; acercando posiciones, no distanciándolas... Animarles a trabajar con diálogo y altura de miras, con rigor y convicción».

Sus últimos mensajes navideños también han ido en esa dirección: «tirar del carro en la misma dirección» (2008), «no nos podemos permitir que las legítimas diferencias ideológicas resten energías al logro de los consensos que piden nuestros ciudadanos» (2009), «debemos unir nuestra fuerzas para alcanzar nuevos logros colectivos» (2010) o «es hora de que todos miremos hacia adelante y hagamos lo posible por cerrar las heridas abiertas» (2012).

Las denominadas «audiencias privadas» del Rey forman parte de la labor que le asigna la Constitución como árbitro y moderador del funcionamiento regular de las instituciones. Aunque en las reuniones con los expresidentes del Gobierno aborda cuestiones políticas y económicas, el tono y contenido de estas entrevistas «son distintos» a los de los despachos que mantenía con ellos mismos cuando eran jefes del Ejecutivo o a los de los despachos que mantiene todas las semanas con Mariano Rajoy, ya que estos otros interlocutores no tienen en la actualidad un mandato político.

De las tres visitas de los expresidentes, la que más interés ha suscitado ha sido la de Felipe González, que según ha podido saber este periódico, tuvo lugar en los últimos tres meses, es decir, después de la operación quirúrgica a la que fue sometida el Rey. La visita de González a Don Juan Carlos ha coincidido con una mayor actividad pública por parte del expresidente, sobre todo en la escena internacional, donde goza de gran prestigio, pero también en España.

PSOE y Monarquía

González se convirtió en diciembre de 1982 y bajo la Monarquía en el primer presidente de un Gobierno socialista, algo que el PSOE no había logrado durante los cinco años de República, a pesar de que fue el partido más votado en las elecciones de 1931 y de 1936. Sólo hubo dos presidentes socialistas antes, pero fue durante la Guerra Civil: Francisco Largo Caballero y Juan Negrín. González, que siempre se ha mostrado satisfecho de su obra política, ahora ve con inevitable preocupación la difícil situación en la que se encuentran España y su partido.

Además, el encuentro de González con el Rey ha coincidido en el tiempo con la reunión que el expresidente del Gobierno mantuvo el pasado 21 de mayo con Mariano Rajoy en el Palacio de La Zarzuela.

De la misma manera que Don Juan Carlos mantiene encuentros periódicos con determinados representantes de la sociedad española, también mantiene contactos habituales, normalmente por teléfono aunque también reuniones, con distintos representantes de la comunidad internacional. Normalmente, estos contactos no salen a la luz pública, salvo que ocurra como anoche, que Don Juan Carlos salió a cenar a un conocido restaurante de Madrid, «La Manduca de Azagra» con Dan Quayle, que fue vicepresidente de Estados Unidos durante el mandato de George Bush.

También el Príncipe de Asturias recibe audiencias privadas todas las semanas. Don Felipe suele citar en su despacho de La Zarzuela a personas de distintos sectores de la sociedad española (políticos de todos los signos, agentes sociales, economistas, juristas e incluso periodistas) para que le trasladen sus impresiones sobre la actualidad.

Audiencias del Príncipe

A veces, son estas personas las que piden al Príncipe que les reciba para informarle sobre algún proyecto o alguna cuestión concreta, y, en otras ocasiones, los encuentros son por iniciativa de Don Felipe. «Así tiene la fotografía más real de la sociedad, porque no se trata de oír solo mensajes favorables, sino reales», explican fuentes de su entorno.

Sin embargo, en los últimos tiempos ha sido la agenda pública de Don Felipe la que ha ganado mayor peso, no por el número de actos oficiales a los que asiste -que son prácticamente los mismos desde hace varios años-, sino por la importancia de los mismos, tanto en España como en el exterior. También sus discursos son cada vez más importantes e incluyen referencias a los problemas más graves de la actualidad. De hecho, la próxima semana Don Felipe tendrá oportunidad de ejercer como anfitrión del Príncipe Heredero del Japón, a quien acompañará a diversos actos y el miércoles le ofrecerá una cena oficial en el Palacio Real de Madrid.