¿Qué es un maestro shaolín?

«El kung fu no es solo lucha y energía física, sino también tener un corazón limpio», aseguraba un maestro de la escuela del Monasterio de Shaolín a Pablo M. Díez, enviado especial de ABC en 2009 a este centro de peregrinación de los aficionados a las artes marciales. «Nuestra escuela intenta enseñar unas pautas de comportamiento basadas en la rectitud del carácter », añadía.

Cincuenta mil alumnos se entrenan en las doscientas escuelas de artes marciales que han proliferado alrededor del monasterio y en la academia oficial del templo, la Base de Entrenamiento de los Monjes-Guerreros de Shaolín. La férrea disciplina en la escuela de Shaolin comienza a las cinco y media de la mañana y se prolonga hasta las nueve de la noche, entre entrenamientos y clases académicas con apenas breves descansos para comer. Otro medio centenar de jóvenes se entrena junto a los monjes-guerreros en el propio monasterio que fundó en el año 495 el monje indio Bodhidharma. Ta-Mo, en su nombre chino, creó una nueva doctrina centrada en la unión del cuerpo y la mente, el Budismo Zen .

Gracias a la práctica diaria y a su capacidad para resistir el dolor adquieren unas facultades físicas casi sobrenaturales como romper una barra de hierro con la cabeza sin lesionarse, adoptar posturas increíbles o vencer al adversario con un solo toque en uno de sus puntos vitales. Con sus técnicas, sin embargo, solo pueden defenderse. «Como budistas, los practicantes de Shaolín rechazan la violencia y, frente a un ataque, simplemente devuelven la fuerza que les llega a la persona que lo envía», explica Carlos A. Álvarez, director del Shaolin Temple Spain .

«Lo más importante del kung fu Shaolin es buscar la esencia de uno mismo a través del entrenamiento . La ley de kung fu es practicar y practicar para perfeccionar todos los movimientos y así perfeccionarse a uno mismo», añade en la web del centro este maestro y monje novicio conocido en su nombre budista como Shi Miao Zang.

De la grulla al dragón, el aprendiz va superando etapas hasta completar los cinco niveles que se corresponden con otros cinco elementos: fuego, metal, madera, tierra y agua, hasta llegar a cinturón negro de instructor. Todavía tendrá que continuar su perfeccionamiento para obtener el grado de maestro (cinturón rojo) y más aún para alcanzar la distinción de máximo maestro o patriarca. «Los auténticos títulos Shaolin solo los entregan los maestros en el templo y en China», recalca Álvarez.

«Nada que ver»

Juan Carlos Aguilar era conocido hasta ayer por ser el primer occidental en ser aceptado en 1997 en el monasterio chino de Shaolín. Así se presentaba él, aunque ahora se ha conocido que no es maestro shaolín. Ni siquiera es monje . Su detención por dejar en coma a una mujer y asesinar al menos a otra más en Bilbao ha conmocionado a los admiradores españoles del kung fu.

El Shaolin Temple Spain, que se presenta como el único Centro en España reconocido por el Templo de Shaolín en China, ha advertido que «lo que él vendía ser no era». «Ya muchos artistas marciales sabemos que este señor siempre ha sido un poco sectario», señalaba antes de advertir que «no es monje y no tiene generación o graduación directa por el templo Shaolin de Henan». Álvarez aseguraba a sus seguidores en Facebook que «lo ocurrido con Juan Aguilar no tiene nada que ver con los demás shaolín». Preguntado por ABC volvía a insistir: «No tenemos nada que ver con ese acto tan atroz y repudiamos cualquier tipo de violencia».

El Shaolin Temple Cultural Center Spain , que dirige el maestro Bruno Tombolato, también lamentaba lo sucedido: «El kung fu (wushu) es un arte marcial y un deporte recreativo que promueve el bienestar y buenos valores y que está muy lejos de los hechos ocurridos».

Juan Carlos Aguilar ha pasado hoy a disposición judicial.