La Fiscalía insta al Supremo a pedir el suplicatorio para juzgar a Blanco
Cree que existen indicios suficientes de que el exministro cometió los delitos de prevaricación y tráfico de influencias
nieves colli
La Fiscalía ha instado al magistrado del Tribunal Supremo que instruye el «caso Blanco» para que solicite al Congreso de los Diputados el suplicatorio contra el ex ministro de Fomento, hoy parlamentario socialista por Lugo, José Blanco. El fiscal cree que, a falta de algunas ... diligencias que permitan afianzar los indicios por posible delito de cohecho, existe base suficiente para llevar a juicio a Blanco por prevaricación y tráfico de influencias. [ Lee en PDF el escrito del fiscal ]
En el escrito, de 28 folios, el fiscal Manuel Dolz relata cómo Blanco, desde su posición de miembro del Gobierno y de destacado responsable del PSOE, medió para allanar el camino a su amigo de la infancia José Antonio Orozco, entonces vicepresidente de Azkar, en la consecución de una licencia ambiental para construir unas naves industriales en los alrededores del aeropuerto de El Prat (Barcelona). Para ello, Blanco habría utilizado sus influencias en el ayuntamiento socialista de Sant Boi de Llobregat.
«Gracias a las actuaciones del seños Blanco -sostiene el fiscal- a favor de su amigo el señor Orozco, la empresa de éste pudo obtener en fecha 7 marzo 2011 las licencias favorables en el Ayuntamiento de Sant Boi, las cuales estaban pendientes de requerimientos municipales, cuyo cumplimiento (...) le hubieran supuesto un coste económico elevado, ahorrándose el desembolso económico que dichos requerimientos municipales conllevaba».
Las escuchas telefónicas practicadas a Orozco han permitido conocer cómo éste, ante las dificultades que ponía el ayuntamiento de la localidad barcelonesa, expresó su intención de utiliza su amistad con el ministro, «Déjame hacer una gestión, voy… (..) voy, voy a, voy a llamar al Pepe Blanco a ver si manda algo allí o allí van por libre o como carallo hacen», le dijo a un tal Antonio a finales de 2010. Poco después, Blanco tranquilizó a Orozco. le dijo que haría una gestión después de Reyes y «te recibe ese; bueno en mal momento vaya no hay ningún problema eh» (…) «vale, vale, pues yo, yo hablo con ellos no te preocupes, eh».
La Fiscalía asegura que gracias a la amistad entre Blanco y Orozco, que los dos sitúan desde la infancia, el empresario ha hecho «partícipe» al exministro «de proyectos empresariales, propios y ajenos» y se «ha prestado a ofrecer a empresarios amigos la actuación de Blanco ante Administraciones Públicas pertenecientes a la Administración Central del Estado». A su vez, Blanco «ha sido conocedor de estos proyectos empresariales y, en ocasiones, como en 1 de diciembre 2010, ha recibido a Orozco en su propio despacho ministerial para tratar de los mismos».
Entre otros proyectos, el fiscal cita dos vinculados al empresario Jorge Dorribo, propietario de Laboratorios Nupel y quien ha destapado la implicacion de Blanco en los hechos. Se trata, por un lado, de la autorizacion a Nupel para la distribución de medicamentos unidosis; y, por otro, de la constitución de una empresa en Andorra (Salut e Innovación) «para la reutilización y exportación de medicamentos vinculada al llamado SIGRE (Sistema Integrado de Gestión y Recogida de Envases, S.L.)».
La Fiscalía insta al Supremo a pedir el suplicatorio para juzgar a Blanco
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