Zverev encoge a Federer

El resultado, 6-3 y 6-4 , sirve para resumir el pulso, siempre con el joven como protagonista. Sin el miedo que transmite Federer por el mero hecho de estar al otro lado de la red, y más ahora que lo gana casi todo, Zverev se soltó en un partido magnífico , repleto de golpes estupendos y de decisiones acertadas. El chico tiene una palanca con el saque, su derecha es portentosa, posee un excelente revés a dos manos y se recrea con su repertorio de filigranas. Lo más llamativo es su capacidad para enfrentarse con tanta soltura a las situaciones límite, sin angustias ni ataduras cuando toca soltar el brazo. Es un escándalo y su andadura con Juan Carlos Ferrero como técnico ha empezado estupendamente (ganó Washington la pasada semana).

El de ayer es el segundo Masters 1.000 de su carrera , vencedor este mismo curso en Roma desnudando a otro mito como Novak Djokovic. Zverev, que ya lleva cinco copas en 2017 e iguala precisamente a Federer en esa significativa lista, inquieta al viejo orden, que desde hace tiempo le señala como el sucesor. De momento, y hasta que los veteranos hagan las maletas, convivirán en una época que se antoja apasionante.

La complicidad en el abrazo de Federer, desaliñado con barba de tres días y con aparentes problemas físicos que le lastraban a la hora de sacar, indica el respeto que se ha ganado el germano en el vestuario. Meses atrás, en la hierba de Halle, el campeón de 19 grandes atropelló a Zverev en la final para exhibir poderío, justo un año después de caer en el mismo escenario ante su rival. Federer, como todos, es consciente de que esta raqueta vale un tesoro, y tiene encima una enorme virtud que escasea entre los chavales de su quinta: la cabeza, en líneas generales, le funciona bastante bien, y eso lo es casi todo en el tenis.

El vestuario se desplaza ahora a Cincinnati, en donde se prolongará la batalla por el número uno . Llega más animado Federer, aunque solo sea por los resultados de Canadá, pero Rafael Nadal también tiene sus opciones de recuperar el ático. El español será número uno si gana el título, si llega a la misma ronda que Federer o si pierde en segunda y el helvético no llega a semifinales.

Mientras, en Toronto, Elina Svitolina confirmó ser la más regular del año al imponerse en la final a Caroline Wozniacki (6-4 y 6-0).