Lopetegui se plantea un dupla Mariano-Benzema

El entrenador del Real Madrid ya alineó a los dos en Moscú durante media hora y el número siete se convirtió en la referencia ofensiva del esquema. Ejecutó cuatro remates, uno al poste , y fue el mayor peligro del campeón de Europa ante el CSKA. El madridista de Barcelona merece jugar más y salir antes al campo.

No ha sido titular todavía y se ha ganado el crédito para ello. «Me ha gustado Mariano, con el 3-0 en contra ha luchado y ha plantado cara, es un jugador que me gusta», indicó Machín, entrenador del Sevilla, cuando le preguntaron por el delantero que el club hispalense quiso y el Real Madrid recuperó. Es ese carácter agresivo, de pelear todos los balones por alto, de pegarse con los centrales, de encontrar el remate en cualquier circunstancia, lo que Lopetegui valora para integrarle cada día más en el equipo. Tiene un salto colosal, supera a los rivales en el fútbol aéreo y solo el infortunio le impidió marcar en Rusia. Sí lo hizo ante la Roma, con un golazo. Ha marcado un tanto en 110 minutos totales de competición, repartidos en cuatro partidos, dos de Liga y dos de Champions. Poco bagaje cuando es «el único ariete nato» de la plantilla.

En el Real Madrid piden tranquilidad. El equipo se encuentra en cabeza de la Liga y tiene todas las opciones para clasificarse en la liguilla de la Champions. Mariano entrará en el esquema paulatinamente. Muchas veces compartirá alineación con Benzema. En las dos participaciones del hispanodominicano en la Copa de Europa ha entrado por Bale y por Lucas, nunca por el «nueve ». Para los técnicos ha demostrado que está en condiciones de jugar constantemente. En Moscú creó cuatro ocasiones de gol en media hora y se piensa que cuando dispute varios partidos de titular con la continuidad que el futbolista desea será el goleador que necesita el equipo en su objetivo de salir de este «stand by» rematador, que «es el único problema real» del conjunto blanco, señalan desde la entidad.

Lopetegui habló con Karim Benzema nada más llegar al Real Madrid y le expuso que, junto a Bale, debería coger el testigo de Cristiano. Anotó cinco dianas en los diez encuentros oficiales disputados esta temporada. Comenzó fuerte, pero no se ha apuntado un tanto en los últimos seis partidos. No lo hace desde el 1 de septiembre, cuando firmó dos ante el Leganés.

El francés no es un delantero centro clásico, es otro tipo de futbolista, un creador que merodea por los alrededores del área, de izquierda a derecha, para hacer paredes y que sean otros quienes finalicen la jugada. Siempre ha manifestado que le gusta tanto marcar como dar el pase decisivo. Por eso es compatible con Mariano, quien en su cabeza solo tiene una obsesión, el gol. Es un depredador del área. Nada que ver con Benzema, un media punta que construye con el «9».

Para el entrenador, Karim es innegociable. «Es un gran jugador, que aporta muchas cosas distintas al equipo, no solo el gol, es un delantero diferente», destaca el responsable deportivo del Real Madrid. Ha disputado los diez partidos oficiales del curso. Solo se ha perdido 51 de los 900 minutos de competición. La carencia de acierto en los últimos tres enfrentamientos exige buscar soluciones, pues el Real Madrid no ha conseguido un gol durante 319 minutos y eso le ha costado dos derrotas y un empate. Para los blancos, el remate es más importante que sufrir goles en contra, todo lo contrario que en otros conjuntos, hechos para defender. Su virtud ha sido siempre conseguirlos y remontar. Mariano es una solución. Habrá días en los que el dominicano sustituirá a Benzema, pero lo que el preparador desea eliminar es el binomio excluyente de Mariano o Karim. No es la clave, subraya.

Lopetegui lanzó un mensaje a la plantilla en Valdebebas: «Esto lo vamos a sacar adelante todos juntos ». Exigió a los jugadores no cometer más errores defensivos, causa principal de las tres derrotas de esta temporada, y el máximo esfuerzo de concentración, actitud y compromiso para superar un momento desagradable. En el seno del club duele haber perdido estos partidos por regalos impensables, que han colocado al equipo en una situación inesperada de la manera más tonta.