Kylian Mbappé gasta la última bala

El jugador va a hablar con el presidente del PSG en las próximas horas, quizá esté hablando cuando usted, lector de ABC, lea esta información. El delantero asume que debe hablar porque tiene que dar la cara y mover su última ficha.

Va a proponer a Nasser Al-Khelaifi que escuche la oferta del Real Madrid, que rondará los 125 millones, dinero al que se sumarán otros 25 en comisiones. Si el presidente catarí le dice que no vende, el jugador le hablará claro y dirá delante de él que firmará por el Real Madrid el 1 de enero, nada más tener luz verde para negociar con otra entidad, sin dejar un atisbo de duda a una posible renovación en plena temporada, como pretende el club parisino.

El Real Madrid pagará 40 millones de prima de fichaje a Mbappé para ficharle el 1 de enero por seis años . Como es normal cuando un jugador viene libre, se le paga una prima de fichaje, como pasó con Alaba.

El club premiará así la fidelidad de Mbappé, que mantiene una relación cercana con el Real Madrid desde hace tres años, con Zidane como mejor embajador , un tiempo en el que no ha renovado por el París Saint-Germain porque quiere venir al Real Madrid.

La casa blanca valora que ha aguantando esta situación y espera que aguante un año más con la esperanza de tener firmado ese contrato el 1 de enero, que entrada en vigor seis meses después. El francés cobrará unos 25 millones netos de ficha en el Real Madrid.

Es una situación dura, tensa, áspera, la que soporta el delantero, porque el presidente del club le echa a los leones con sus declaraciones, pero hay que dar el paso adelante si quieres conseguir tu objetivo. No puede continuar en silencio. El que calla otorga y este lema en el fútbol es mucho más cruel. Si no abres la boca, te comen. Delphine Verheyden, la abogada fichada por Kylian Mbappé antes de la pandemia, le aconsejó que dialogue directamente con Nasser Al-Khelaifi , cara a cara, para dejarle muy claro que no piensa renovar por el París Saint-Germain y manifestarle que si no es traspasado ahora firmará por el Real Madrid nada más nacer 2022, en las primeras horas de enero, un contrato por seis años que entrará en vigor en julio del próximo año.

El jeque de Catar ha manifestado hasta ahora que no le traspasará. Cree que el jugador caerá durante la próxima temporada en sus redes, gracias a los títulos que pueden llegar junto a Messi y a la presión que ejercerá la afición y la misma entidad. Pero el delantero ha resistido todas las ofertas, 36 millones netos anuales durante seis campañas es la última, y está molesto por la utilización que Al-Khelaifi hace de la grada, a la que ha puesto en su contra. Actualmente cobra 21 millones netos, con bonus, y cuando señala que Neymar y Messi ganan mucho más le contestan que si renueva percibirá la misma masa salarial.

«Ya no tiene argumentos para no renovar» es la frase de Al-Khelaifi que ha enojado a la estrella, pues provocó que los seguidores le silbaran el sábado cuando fue presentado en el Parque de Los Príncipes. Esas tácticas pueden repetirse a lo largo de una campaña que puede ser muy cruda. Mbappé no quiere comprobarlo y solicitará al PSG que estudie la propuesta del equipo madrileño. Desea su traspaso. Y asegura que si le obligan a quedarse, seguirá hasta junio y luego se marchará gratis.

El Real Madrid espera. José Ángel Sánchez ya ha dicho a escala profesional entre ambos clubes y volverá a recordar ahora que la entidad madridista tiene 150 millones previstos para abonar el traspaso y q ue si el club parisino aprueba la negociación debe actuar ya.

El francés dejará claro al dirigente del PSG que, si le obligan a quedarse en su último año de contrato, no piensa renovar a lo largo de la próxima temporada y que su meta es rubricar el 1 de enero su contrato por seis años con el Real Madrid.

Al-Khelaifi ha expuesto siempre que Mbappé se queda y que no hay que negociar nada, pero hay voces internas que aconsejan vender y ser prácticos si no renueva. Aunque el petróleo y el gas de Catar pagan verdaderamente los extraordinarios gastos en adquisiciones del PSG, cuya deuda ha aumentado de 96 a 204 millones en doce meses, lo cierto es que cuesta rechazar 150 millones por un futbolista que se va libre en un año. Al-Khelaifi quiere que Kylian, como le llama, se quede para ver si junto a Messi y Neymar cambia de postura si conquistan la primera Champions de su palmarés, que es la obsesión del jeque, de la afición y de todo París. La estrella tiene en su mente que debe aguantar, porque el Real Madrid le ofrece seis años que estarán firmados, con sus cláusulas de salvaguarda, el 1 de enero .