Así ha sido la presentación del nuevo estadio Ramón Sánchez-Pizjuán

De esta forma, y pese a la situación tan crispada que se vive desde el club por su situación deportiva, tras una de las asambleas más complejas que se recuerdan, se ha podido ver la proyección de la reconstrucción tanto exterior como interior del nuevo coliseo nervionense, que luciría una nueva cara muy distinta a la que tiene en la actualidad, mantendría el nombre del reconocido expresidente y a su vez tiene como fin el de su explotación más allá de los partidos del Sevilla. Eso sí, no se movería de la ubicación actual en la que se encuentra el recinto deportivo, de modo que seguirá quedando emplazado en la calle Sevilla Fútbol Club de la capital andaluza.

Ya explicó el vicepresidente del Sevilla, José María Del Nido Carrasco, en una comparecencia de hace pocos meses, que el nuevo Ramón Sánchez-Pizjuán tendría una ampliación del aforo pasando de los 42.500 espectadores hasta los 55.000 asientos con un 10% de los mismos de condición VIP, multiplicando así los ingresos para beneficio del cuadro sevillista, y convirtiéndose en el sexto estadio por capacidad más grande de toda España.

Ha explicado el Sevilla en una nota extensa el anteproyecto que pretende «identificar los valores clave en las grandes etapas de la historia de Sevilla a través de la referencia a grandes ejemplos de su arquitectura y patrimonio cultural como el Real Alcázar, el Archivo de Indias o, la Catedral de Sevilla, para proyectarlos a un nuevo Estadio, contemporáneo, sostenible, tecnológico y arraigado en la tradición de la ciudad», establece.

Lo que busca este nuevo espacio es además cumplir tres pilares clave que vayan en consonancia: «Renovar la tradición de la bombonera de Nervión y potenciar aún más la increíble atmósfera de fútbol para una plena experiencia del espectador. Situar al Nuevo Ramón Sánchez-Pizjuán al nivel de una infraestructura de referencia para las más altas instancias del fútbol, mediante el uso de las tecnologías más avanzadas aplicadas a la seguridad, retransmisiones televisivas, la experiencia del aficionado y la sostenibilidad. Y por último, trabajar en pro del interés público mediante una cuidada relación del nuevo estadio con su contexto urbano, respetando la escala del barrio de Nervión por un lado y generando espacio público urbano que pueda ser disfrutado por los vecinos los 365 días del año, con nuevos usos asociados, por otro», fija.

También se recuerda en este punto que el proyecto de la que será la casa de todos los sevillistas ha sido elaborado por la empresa IDOM, que en España se hizo especialmente conocida en el sector deportivo por haber ejecutado el proyecto del estadio Nuevo San Mamés para el Athletic Club en la ciudad de Bilbao. Del mismo modo, hay que incidir que el nuevo Ramón Sánchez-Pizjuán no se moverá y seguirá en su ubicación actual que el dirigente denominó como «su casa», según informó en su momento el entonces vicepresidente primero. Ahora, se ha tomado de referencia a «grandes ejemplos de su arquitectura y patrimonio cultural como el Real Alcázar, el Archivo de Indias o, la Catedral de Sevilla, para proyectarlos a un nuevo estadio, contemporáneo, sostenible, tecnológico y arraigado en la tradición de la ciudad», refiere el escrito.

También expresa el Sevilla que el nuevo estadio contará con un graderío «que recordará mucho a nuestro actual estadio, cercano al terreno de juego, volcado hacia el césped, pero que incrementará el confort, generará una nueva y numerosa oferta de hospitality y creará un novedoso fondo continuo para la animación local, sin precedentes en el fútbol español», cuenta el Sevilla. Todo ello junto con la nueva cubierta de todas las gradas, «creará un ambiente futbolístico para los aficionados sevillistas mayor aún que el de nuestro estadio actual. Y no solo eso, sino que se permite con todo ello un crecimiento sustancial en las actividades del Sevilla FC tanto en las competiciones nacionales como en los encuentros de competiciones internacionales y otros eventos. El nuevo recinto contará con dos plantas de parking y eliminará sustancialmente el número de escaleras en el estadio. Además, incluirá salones y espacios para la organización de eventos, así como una nueva tienda oficial y el nuevo Museo del club», abunda.

Tal y como informó José María del Nido Carrasco en el World Football Summit, la idea es que con el nuevo feudo de Nervión, se puedan maximizar sus beneficios económicos y que se puedan generar ingresos y acoger actividades los 365 días del año y no sólo los días de partido, dando también pie a la celebración de conciertos o conferencias, entre otros eventos de ocio que permitan hacer negocio. Con esta iniciativa, «se podrá ampliar la relación de los clubes con los clubes visitantes y generar nuevas vías de ingresos, puedan participar de manera destacada en la creación y mejora de los espacios urbanos de sus cercanías», tal y como ha quedado presentado por los medios oficiales del club.

En definitiva, será el nuevo Ramón Sánchez-Pizjuán «un estadio abierto y relacionado con su entorno inmediato, especialmente con la creación de una fachada sur que vuelca sobre la plaza, que propone terrazas y otros usos accesibles a los ciudadanos y que mediante un generoso espacio sombreado activa el entorno urbano transformándolo en la nueva Plaza de Nervión y de Sevilla. Una plaza versátil, flexible, un espacio sombreado, ventilado y fresco, una entrada principal para el estadio, la nueva cara del Sevilla».