Betis - Sevilla: dos buenas rachas para elevar al fútbol sevillano

Las trayectorias de ambos equipos se diferencian únicamente en el arranque de las mismas. El Sevilla tuvo un inicio prometedor, con una goleada por 3-0 al Rayo en Nervión, otro triunfo agónico en Getafe por la mínima, y un empate consecutivos como visitante ante Elche (1-1) que le dejaron antes del primer parón por los partidos internacionales con siete puntos y en la segunda posición del campeonato. Empezó a vislumbrarse en este inicio que al Sevilla le iba a costar más sacar victorias lejos de su estadio que ante su gente. Por el bando contrario, el arranque no fue bueno. Tras empatar en el debut ante el Mallorca y en su estreno como local ante el Cádiz , dos equipos llamados a luchar por la permanencia, la tercera jornada trajo una derrota ante el Real Madrid (0-1) y el Betis se marchaba al parón en decimocuarta posición con dos puntos y la necesidad de empezar a sumar de tres en el regreso a la competición en Granada. No mostraba aún los síntomas de un equipo que tuviera clara su idea de juego.

Solventó el primer momento importante de la temporada el equipo de Pellegrini con el triunfo en la capital nazarí (1-2) que le dio el empujón anímico para empatar de como local ante el Espanyol (2-2) y sacar dos buenas victorias consecutivas ante Osasuna (1-3), su mejor resultado como visitante, y el 2-0 ante el Getafe como local que colocaban ya a los verdiblancos en la séptima plaza de LaLiga. Sin embargo, justo antes del segundo parón, el de octubre, el once verdiblanco no hacía un buen partido y sufría una derrota en Villarreal (2-0) que les hacía marcharse algo cabizbajos a esas casi dos semanas sin fútbol que restaban por delante. En el lado contrario, menos partidos por el aplazamiento del Sevilla-Barcelona por la demora en el regreso de los internacionales sudamericanos. Tras empatar ante la Real Sociedad (con la clásica mala primera parte de los de Lopetegui), llegaron dos triunfos solventes ante Valencia (3-1) y Espanyol (2-0), que se estropearon algo con la derrota justo en Granada (1-0) justo antes del citado parón de selecciones de octubre. Aún así, el Sevilla llegó al mismo como cuarto clasificado y, por ende, dentro de sus objetivos de la temporada.

Tanto Betis como Sevilla recuperaron la sonrisa inmediatamente después de regresar del parón con dos idénticas victorias como visitantes, en Vitoria ante el Alavés los verdiblancos con un solitario gol de Borja Iglesias, y en Vigo ante el Celta los sevillistas merced a un tanto de Rafa Mir. Dos victorias más de bastante enjundia y desplegando un muy buen nivel logró el Betis en el campeonato liguero tras imponerse a Rayo (3-2) y Valencia (4-1) que le situaron empatados a puntos con sus vecinos sevillistas, que habían ganado al Levante (5-3) y empatado en Mallorca (1-1). Sin embargo, la última jornada liguera previa a este derbi dejó sensaciones adversas. En el Betis fueron malas por caer en un mal partido en el que se vio superado en todo momento por el Atlético (3-0); y buenas en el Sevilla por imponerse sin mucho sufrimiento a un equipo pujante este año como Osasuna (2-0). Toda una trayectoria que tiene contentos a béticos y sevillistas antes de verse las caras en un Benito Villamarín que estará lleno para presenciar el duelo de dos estilos diferentes que les han servido para, hasta el momento, cumplir con sus objetivos de la temporada. Tras el duelo habrá tiempo para rumiar en la cabeza la victoria o la derrota, ya que se viene un nuevo parón de selecciones nacionales que puede sentar mejor o peor según lo que ocurra en el partido.

Una cosa es la marcha de los equipos en la competición en la que coinciden y otra su desempeño en Europa. Ahí estén en peor situación los sevillistas, que son colistas de su grupo y se ven obligados a ganar sus dos próximos partidos si quieren materializar su clasificación para octavos de final de la Liga de Campeones. Ni un partido ha logrado vencer el conjunto de Lopetegui, que empató sus tres primeros duelos ante Salzburgo, Wolfsburgo y Lille , equipo este último ante el que sufrió una derrota compleja para sus intereses en el choque previo a este derbi.

En el lado verdiblanco la situación en su grupo de la Liga Europa es mejor, pero no le conviene confiarse en lo que resta de fase de grupos. La última derrota ante el Bayer Leverkusen (un rotundo 4-0) ha dejado al Celtic a un punto y la clasificación depende de no cometer más errores en los restantes partidos ante Ferencvaros y Celtic de Glasgow.