Los cabos sueltos de MotoGP

Muchos han renovado ya con sus plantillas, pero hay huecos sorprendentes que auguran bailes y juegos de palabras de aquí a las próximas semanas. Los micrófonos también cobran vida.

En MotoGP es Jorge Lorenzo quien acapara la atención porque todavía no ha firmado con nadie y no se le ve un futuro muy halagüeño en Ducati. Respondió el balear a las palabras de Domenicalli, quien le decía que ni él ni sus técnicos habían logrado exprimir la moto. «No soy un gran piloto, soy un campeón» , atajó, dispuesto a seguir en lo más alto del ranking de pilotos y acallar las voces de una posible salida en falso del Mundial. «Seguiré corriendo dos años más y en una moto competitiva», advirtió.

Sus palabras abren opciones a una posible vuelta a Yamaha , que Lin Jarvis no cerró. El jefe de la marca azul dejó un «puede ser» esperanzador y tanto Rossi como Viñales vieron con opciones esa carambola. Aunque también se abre la vía de que Yamaha cree un equipo nuevo en el que Lorenzo sería su baza . Tres pilotos de gran categoría al servicio de una moto que se ha descontrolado con su ausencia.

Joan Mir se une a la fiesta con su intención de subir a MotoGP el próximo curso , gane o no gane. Algo que lo diferencia de Márquez porque este sí quería ascender como campeón. Sin embargo, el mallorquín atiende a ofertas y, por el momento, nada puede decir. Aunque ya tendría algo acordado y podría desvelarlo en el Gran Premio de Cataluña. Para animar la tensión, Andrea Iannone confirmó que no seguirá en Suzuki, por lo que se le abren puertas a Mir. En medio del revuelo, y sin hablar demasiado, también Dani Pedrosa necesita una confirmación de que Honda lo sigue queriendo.

Antes de que se enciendan los motores, ya hay espectáculo en Mugello, un territorio al que acude Márquez como líder y como diana . En 2016 sufrió las «represalias» de una afición volcada con su ídolo local, Valentino Rossi, y que no perdonó el incidente en Sepang del año anterior. En 2018 el español vuelve a estar en la mira de los seguidores rossistas por la caída del italiano en Argentina. «Tapones, cascos y ya está», sentenció el español ante la posibilidad de escuchar silbidos a cada paso.

Además, el de Honda solo ha ganado una vez en este circuito, en su fantástico 2014. Y es aquí donde Andrea Dovizioso se impulsó el año pasado con su primer triunfo en esa campaña para hacerle frente hasta el final. Además, a una moto competitiva como la Ducati, Lorenzo suma confianza porque es un trazado que ha ganado en cinco ocasiones.