Las diecisiete medallas de los españoles

La jornada de ayer arrancó con el bronce de Saúl Craviotto en la prueba de K1 200 metros. Le siguió la plata de la selección femenina de baloncesto , derrotada en la gran final por las favoritas: Estados Unidos. Cerró el día, de manera inmejorable, Ruth Beitia en el salto de altura, con un oro que, a sus 37 años, supone un inmejorable broche a toda una carrera.

El taekwondo nos brindó otras dos medallas. Fueron las obtenidas por Eva Calvo en la categoría de menos de 57 kilos (plata tras perder con la máxima favorita), y por Joel González , oro en Londres 2012 (bronce). Orlando Ortega cerró el capítulo de platas, cuatro, con una soberbia carrera en el 110 metros vallas. Los seis bronces se completan con el de Lydia Valentín en halterofilia —categoría de menos de 75 kilos—, que pudo por fin subirse a un podio y disfrutar en él de un triunfo olímpico (es campeona en Londres 2012 por positivo de las 3 atletas que la precedían), y con el de Mireia Belmonte en los 400 metros estilos.

Fue la nadadora de Badalona la que abrió el otro capítulo, el más abundante para los deportistas españoles: los oros, siete en total. Lo consiguió en su prueba fetiche, los 200 metros mariposa. Le siguieron Maialen Chourraut en el piragüismo eslalon, Nadal y López en el dobles masculino de tenis, Marcus Cooper Walz en el piraguismo de velocidad (1000 metros), donde también vencieron Craviotto y Toro (en su caso en los 200 metros). La número uno mundial del bádminton, Carolina Marín , logró también el oro al derrotar en la final a la india Pusarla Venkata Sindhu.