El clásico: once duelos y un ganador

Casillas - Valdés: 1 - Uno de los duelos más desequilibrados. El azulgrana es un gran guardameta que atesora buenas actuaciones, como en el partido de ida de semifinales de la «Champions» ante el Chelsea, pero no está al nivel de Iker. El mostoleño está ... un escalón por encima, pues a las buenas actuaciones une un par de milagros cada jornada, resultando mucho más decisivo. Sin ir más lejos, detuvo el penalti de Casquero. Sergio Ramos - Dani Alves: X - Compañeros en el Sevilla, el sábado lucharán por ser el mejor lateral derecho del encuentro. El brasileño es una máquina. No para de correr durante todo el partido ocupando una zona muy amplia del campo, y además llega con mucho peligro al área rival. El de Camas no atraviesa su mejor momento de juego. Se le ve despistado y no ha vuelto a alcanzar el nivel que tuvo el año pasado. Pese a todo, sólo con su derroche físico y su carácter le basta para igualar el duelo con Alves. Cannavaro - Puyol: X - Ambos están atravesando un buen momento. El catalán es un seguro de vida. Muy serio y fundamental para su equipo por su liderazgo. El italiano ha estado más irregular durante esta campaña, sin embargo en las últimas jornadas ha alcanzado un nivel espectacular. Además también tiene mucha ascendencia sobre sus compañeros, es otro capitán en la sombra. Metzelder - Piqué: 2 - Lo de el alemán es para destacar. Suplente durante la mayor parte de la temporada, cuando ha sido requerido por Juande ha cumplido con su labor a la perfección. En el partido de Sevilla estuvo sencillamente genial, pase de gol incluído. Sin embargo, este duelo es para Gerard Piqué. La temporada del central catalán está siendo un espectáculo. Sobrio, casi infranqueable, y demostrando una madurez que no se corresponde con su juventud. No sólo defiende sino que sale desde atrás con peligro y tiene gol. Marcelo - Abidal: 1 - Al joven brasileño del Madrid le ha costado, pero parece que se ha asentado por fin en el equipo titular. Juande le dio mucha confianza situándolo como interior, más cerca del gol, y se ha convertido en un jugador desequilibrante. Como lateral le cuesta más, pero su moral está por las nubes. Abidal, simplemente correcto. Discreto. Ha ido de más a menos.