Final de infarto en el torneo «3x3 ACBNext»

Los pasos a seguir eran simples. Lo primero que debían hacer era jugar una fase de grupos previa a unos cuartos de final que se encargarían de filtrar a los cuatro mejores equipos del torneo. Nada fuera de lo común. Cada partido «3x3» duraría 10 minutos . Con el mismo entusiasmo que ya habían demostrado a lo largo de las fases previas celebradas durante el mes anterior, los jugadores saltaron al campo sin miedo, llenos de energía y de ganas de hacerse un hueco entre los elegidos. Antes de las 11 de la mañana, las tablas de los grupos aún no permitían intuir quién se clasificaría para la recta final, nadie se atrevía a pestañear.

Mientras, en el exterior de las canchas todo era diversión . Los distintos patrocinadores del evento habían levantado en una explanada diversas carpas que se encargaban de entretener a los acompañantes. Ríos de niños se pasaban de unos a otros; tan pronto podían estar haciendo cola en un extremo de la mesa Movistar con la intención de maquillarse en el rostro los rasgos de un fiero tigre, como decidían cambiarse a una de las pantallas virtuales de Caixabank para practicar sus triples. Si en mitad de la euforia alguno de ellos comenzaba a notarse sediento, allí estaban las azafatas de Cola-Cao dispuestas a ofrecerles un refrigerio gratuito.

La organización del evento tenía planeada una mañana en la que nadie iba a tener tiempo para dejar de pasárselo bien. A eso del mediodía una nueva sorpresa iba a dejar atónitos a todos los presentes: en uno de los descansos entre los partidos previos a los cuartos de final, justo después de que el «speaker» anunciase el sorteo de un reloj de la Liga Endesa , las gradas enmudecieron al ver aparecer en la pista a Ondřej Balvín , pívot del Movistar Estudiantes. Él fue la mano inocente que sacó el primer número premiado de la mañana. Luego vendrían muchos más (con premios tan espectaculares como dos billetes de avión a cualquier lugar de la Península). La ola realizada por los aficionados era una prueba más del estado de euforia en el que se encontraban.

No muy lejos de toda esa fiesta, un poco más allá de las carpas, una solitaria canasta era el escenario de otro de los grandes acontecimientos del día. 48 chavales competían por sentarse en el trono como el mejor triplista «ACB Next ». También en este torneo el formato era sencillo. Los ocho mejores competirían hasta que sólo quedase uno. El nivel era altísimo. En una final muy igualada, Pedro Barrios, alumno de Primaria, se impuso a Rafael Rodríguez, un rival más que digno que no se rindió en ningún momento.

Los cuartos de final comenzaron ante las caras displicentes de todos aquellos que no querían que el torneo llegase a su fin. Además, trajeron la sorpresa del campeonato cuando el equipo del Colegio Loyola de Palacio , formado únicamente por niñas y uno de los que mejor baloncesto estaba realizando, cayó eliminado ante el Tierno Galván . A esas alturas cualquier detalle podía marcar la diferencia; las canastas se vendían muy caras.

Una vez alcanzada la última fase la gente tuvo que enfrentarse al gran dilema del día: cuál de las dos semifinales seguir. Por suerte para todos, ninguno de los partidos decepcionó. Al final, después de tantos días de entrega, los finalistas del torneo de baloncesto escolar «3x3 ACB Next» serían el San Juan Bosco y el Mariana de Pineda .

El partido comenzó con uno de los contendientes dominando el parqué sobradamente. El Mariana de Pineda llegó al descanso con una holgada ventaja de 2-6 sobre el San Juan Bosco . Todo parecía visto para sentencia, pero es en los momentos más difíciles cuando los verdaderos campeones deben demostrar su valía. Los jugadores parecían saberlo y, tanto los que iban por delante en el marcador como los que se encontraban ante la difícil tarea de la remontada, no quisieron dar nada por sentado hasta el pitido final.

La segunda parte, como se presumía, trajo consigo una respuesta heroica por parte del San Juan Bosco , que en pocos minutos había logrado igualar el marcador. A pocos segundos del final, tras una finta poco ortodoxa, una canasta in extremis terminó por firmar la remontada. Con el Mariana Pineda volcado en ataque, a un segundo del pitido del árbitro, los nuevos favoritos solo tuvieron que aprovechar un error en un pase de sus contrincantes para encestar el 8-6 definitivo , que les otorgaba el privilegio de convertirse en los primeros campeones del torneo organizado por la ACB, con la colaboración de la Comunidad de Madrid. David Sanz , jugador del equipo vencedor, recogió el trofeo al MVP del partido .