Un palmeo en el último suspiro provoca la primera derrota del Real Madrid

Hasta entonces, el Real Madrid volvió a exhibir los mismos defectos y virtudes que durante el primer tramo de la temporada. Sesteó por momentos sobre la pista, asentado en el talento de Llull y la superioridad de Bourousis bajo el aro y luchó para no quedarse descolgado, con un gran Sergio Rodríguez que sigue encontrando con suma facilidad a sus compañeros. Las alarmas se encendieron en el tercer cuarto, cuando el acierto de Osman puso diez puntos de distancia en el marcador (50-40, min. 24). La remontada exprés del Real Madrid la comandó un Llull en vena, que acabó con 20 puntos y dos errores fatales en los últimos segundos.

Consumada la remontada, un triple de Carroll y un contragolpe finalizado por Nocioni parecían sellar el triunfo blanco (68-71), pero de nuevo Osman puso la igualada en el electrónico. Fue entonces cuando Llull falló lo increíble. Después de anotar desde todas las distancias en un partido notable por su parte, el balear erró una bandeja sencilla y un triple sin oposición, lo que dejó la última posesión al Anadolu Efes. En esos seis segundos, los turcos fallaron dos lanzamientos, pero encontraron el palmeo salvador de Korkmaz, justo en el límite del tiempo.