Griezmann y la afición del Atlético se reencuentran

Griezmann es el último eslabón de la alineación, delantero en punta, pero en la presentación del equipo por la megafonía el francés es el penúltimo y su nombre se anuncia rápido , sin mucha pausa, antes del cierre con Joao Félix. Una manera de evitar que los pitos puedan sacudir el tono de la alineación.

Tampoco hay silbidos para el galo, como en el resto de encuentros que ha disputado en el Wanda, porque apenas toca el balón y el Liverpool ya ha calzado dos tantos en la portería de Oblak. A modo de recordatorio, su placa en el paseo de la fama del estadio tiene apenas tres o cuatro pegatinas adosadas a su nombre.

El partido se pone de cara a la calidad y el talento de Griezmann, autor de dos goles en la primera parte, el segundo primoroso al aprovechar con un control orientado en las narices de Van Dijk un gran pase de Joao Félix. Griezmann celebra los goles con rabia y naturalidad, acercándose a la grada.

La expulsión por una roja discutible, ya que el jugador no tenía voluntad de golpear a Firmino en una jugada que puede saldarse con amarilla por juego peligroso, enciende al estadio. Griezmann era uno de los mejores y el partido se ponía negro. La afición colchonera lo despide con palmas , premio a su dedicación, aunque cuesta asumir que haya afecto.

Griezmann se ha hecho fuerte en la Champions, tres goles ante el Milán (uno) y el Liverpool (dos). Aún no ha anotado en la Liga. La única vez que ha hablado de su presente y pasado fue después del choque contra el Milán, tras anotar el primer gol de la remontada.

«Griezmann está jodido por dejar al equipo con diez -explicó Simeone en defensa de su jugador-. La actuación de Griezmann es la que se puede esperar de él , se asoció bien con Joao y Lemar y trabajó el partido defensivamente como queríamos».

Cada vez más, el club hace suyas las palabras de Paulo Futre , quien dijo cuando en los primeros partidos de la temporada. «Como profesional o exprofesional, entiendo a Griezmann. Como colchonero, también entiendo los pitos, pero creo que no podemos pitar más a Griezmann. Cada vez que pitamos a Griezmann, vamos a ir contra el Atleti».