Adel Mechaal, lejos de las medallas en el 3.000

A Mechaal se le ha visto incómodo durante una carrera excesivamente errática, en donde nadie parecía querer asumir el mando. Solo a falta de 700 metros comenzó a tirar Barega. Mechaal permaneció siempre en el grupo delantero, pero su gesto de sufrimiento no hacía presagiar que tuviera en las piernas el cambio de ritmo necesario para optar a la medalla. «Los cuatro últimos días de viaje no han sido los adecuados», esgrimía el catalán nada más acabar la carrera. «Me ha faltado descanso». Al entrar en la recta final Mechaal se veía también por detrás de los dos keniatas Daniel Ebenyo y Jacob Krop, y del marroquí Zouhair Talbi. Finalmente cruzaba séptimo con 7:43.60.

«A toque de campana estaba ahí, luego Scott me ha cerrado. me he visto muy encerrado, he intentado salir pero las fuerzas no han acompañado. Me ha faltado frescura. Roca seguir trabajando para la próxima».

Mechaal da por concluida su temporada invernal con una pequeña decepción, sobre todo después de haberse convertido en el nuevo recordman europeo de la distancia el pasado mes de febrero, cuando ganó en Nueva York con 7:30.82.