Los consejos de Chema Martínez para atletas amateurs

"No pienses, corre" (Espasa) expresa en primera persona los sentimientos y los consejos de un atleta excepcional que busca entre las letras la complicidad de un lector que ya ha superado el sedentarismo y quiere en su horizonte retos que le permitan hallar su fortaleza interior, física y mental.

Y paso a paso, como se consigue llegar a la meta, Chema Martínez dibuja el panorama, a veces eufórico a veces desolador, que se encontrará el lector a la hora de afrontar sus primeras carreras, sus primeros entrenamientos, sus primeros cuidados alimenticios, quizá su primer maratón.

El atleta hace un repaso de las mejores condiciones para entrenar, el material adecuado, los ejercicios. Con consejos que ilustran, como si de un entrenador personal se tratara, la búsqueda del límite que cada uno tiene. Con la rapidez y la soltura en su escritura de una buena zancada y la motivación intrínseca de un metro avanzado.

Aunque el propio corredor admite que el sueño de terminar un maratón (y enseguida querer iniciar la siguiente) no solo parte de uno mismo. La familia, los amigos, incluso el trabajo porque ayuda a crear negatividad que los entrenamientos diluyen, provocan un estado óptimo para levantarse cada día para realizar una tabla de ejercicios o saltar a la piscina para fortalecer los músculos a la vez que se relajan.

"No pienses, corre" estimula al lector porque su lectura le iguala al olímpico, que le trata de tú a tú, y le aconseja porque les separa la experiencia. Amena lectura para encender la llama de la competitividad individual porque correr no es divertido ni placentero. Más bien es aburrido y costoso, pero todo está en la cabeza. La lucha contra uno mismo es lo que impera tanto en el libro como en la carrera. Por eso, no hay que pensar, sino correr. Solo así la meta estará más cerca.