LIBROS
Retrato de Felipe VI en una España en crisis
José Antonio Zarzalejos compone un exigente e imprescindible trabajo sobre la figura de Felipe VI y la monarquía parlamentaria en las democracias contemporáneas
Discurso televisado del Rey Felipe VI el 3 de octubre de 2017
Desde 2004-2007 (atentado islamista en Madrid, gran recesión económica), desde la pos-Transición, España está en crisis: proçés catalán, transformación del sistema de partidos, irrupción de movimientos anti-sistema, abdicación de Juan Carlos I, gobierno (2019) apoyado parlamentariamente por partidos ... anti-españoles, pandemia de coronavirus … La crisis parece, en efecto, amenazar seriamente a España como estado y como nación, y a la misma forma política del estado, la Monarquía parlamentaria, que desde 2014 preside Felipe VI. Eso puede concluirse de Felipe VI. Un rey en la adversidad, el nuevo libro de José Antonio Zarzalejos, tal vez el mejor articulado de los analistas actuales de la política española.
Zarzalejos analiza España desde el periodismo, pero su tiempo periodístico no es ni inmediato ni circunstancial: al contrario, tiene profundidad, pulso y valor permanentes . El libro, que se adentra en los entornos políticos, familiares y personales de los reyes Juan Carlos I y Felipe VI y de toda la familia real, se lee con avidez. No porque el lector vaya a encontrar en sus páginas la sensación del escándalo, que no la hay, sino exactamente por lo contrario: por la implacable lucidez analítica de su autor.
Rasgos más notorios del Rey: contención emocional y sentido de la responsabilidad
Zarzalejos ha centrado su preocupación por España en la institución que desde 1978 remata y define la estructura política de la democracia española, en el Rey en tanto que jefe del Estado. El tema es por definición capital. De acuerdo con la Constitución, e l Rey, que carece de poder ejecutivo, es el símbolo de la unidad y permanencia del estado, esto es, de España -democracia plena, estado social de derecho, estado autonómico- como tal estado y nación. Felipe VI. Un Rey en la adversidad es, pues, un tratado sobre el Rey en la Monarquía parlamentaria.
El periodista José Antonio Zarzalejos
Zarzalejos se centra para ello en la importancia que para la democracia española tuvieron la crisis de la Corona de 2014 (abdicación de Juan Carlos I, proclamación de Felipe VI) y los primeros años de gestión de Felipe VI (y la que podrán tener lo que este último, y tras él, Leonor I, hagan en el futuro).
Abdicación
Zarzalejos es así, y se entiende, severísimo con Juan Carlos I. No con su papel en la Transición y en los primeros treinta años de reinado, que nadie discute y que son ya el haber -espléndido- del Rey ante la historia; sino con su conducta posterior que hizo de su abdicación, así lo entiende Zarzalejos, una necesidad institucional e histórica (y constitucional: la Constitución contempla exclusiones a la sucesión en el trono, abdicaciones, renuncias e inhabilitaciones en el ejercicio de la autoridad del rey). Y a la inversa. En razón de los rasgos más notorios de la personalidad de Felipe VI - sentido de la responsabilidad, contención emocional, corrección de maneras y expresiones, respeto-, y de su conducta en su primera gran intervención pública -su discurso de 3 de octubre de 2017, reafirmando, ante el desafío independentista catalán, el compromiso de la Corona con la Constitución , la democracia y la permanencia de España-, Zarzalejos precisa lo que es, y debe ser, la Monarquía parlamentaria en las democracias contemporáneas (y por tanto, en España): una instancia institucional irreprochable de ejemplaridad pública y privada.
Se lee con avidez. No va a encontrar el lector sensación de escándalo sino una implacable lucidez
En el libro, claro, hay mucho más. Zarzalejos se pronuncia a favor de la expatriación en 2019 de don Juan Carlos, porque entiende, creo que con razón, que la situación creada en 2014 -dos reyes: Rey titular, Rey emérito- era un grave error, una anomalía institucional. Su opinión sobre la reina Letizia es igualmente positiva ; no, quede claro, por cortesía del autor sino porque entiende, y vuelve a llevar razón, que con su fuerte personalidad e inteligencia Dª Letizia ha definido bien su papel como reina consorte, figura, no se olvide, como su anverso el rey consorte, siempre importante y difícil en las Monarquías, y especialmente así en las sociedades democráticas e igualitarias contemporáneas (en las que los enlaces dinásticos, o asimilables, han terminado por hacerse indeseables).
Amenaza
Felipe VI. Un rey en la adversidad es en suma un libro sustantivo, trascendente: obliga a pensar en serio. De su lectura se desprende que la Monarquía parlamentaria es un ámbito razonable para la democracia, y que replantear en España la cuestión de la forma del Estado sería un error grave y lo que es peor, innecesario. En 1975, el problema de la democracia en España no era ya, como en 1931, monarquía o república. En un artículo de 2014, Jon Juaristi recordaba que a Javier Pradera -uno de los ensayistas más brillantes de la izquierda democrática española- republicanismo le sonaba tras la Transición a caspa y a mesa camilla. ETA, no la forma del estado, fue el gran problema de la Transición. Desde 2010, el problema es el que señaló Savater también en 2014: la seria amenaza de desarticulación del país. Que nadie se equivoque.