El hijo de la Infanta Elena, operado al disparársele una escopeta en un pie

Los hechos se produjeron hacia las cinco de la tarde en el patio de la casa de la finca de Soria. Felipe Juan Froilán y su hermana pequeña, Victoria, se encontraban con su padre apurando las últimas horas de las vacaciones de Semana Santa, antes de regresar a Madrid para reanudar hoy las clases. Felipe iba caminando con una escopeta de dos cañones y de calibre 36 que apuntaba al suelo cuando esta se le disparó. Al ser muy corto el recorrido, los perdigones no llegaron a abrirse y le produjeron un orificio de entrada y otro de salida en el pie derecho. El nieto mayor de los Reyes fue trasladado inmediatamente al Hospital Santa Bárbara de Soria, donde el personal sanitario le realizó las primeras curas antes de enviarle a Madrid.

Felipe ingresó en la clínica madrileña hacia las diez de la noche y una hora después fue sometido a una intervención quirúrgica con el fin de retirarle los perdigones que se habían quedado alojados en el interior del pie.

En estos días, Felipe y Victoria se encontraban pasando la segunda parte de las vacaciones de Semana Santa con su padre, después de haber compartido la primera mitad con su madre, Doña Elena, en la estación de esquí de Baqueira Beret. Por esta razón, ni él ni su hermana acompañaron a los Reyes, los Príncipes de Asturias y a Doña Elena en la mañana del pasado domingo a la Misa de Resurrección en Palma de Mallorca.

Desde el pasado mes de septiembre y después de pasar un año en un internado de Inglaterra, el hijo de Doña Elena estudia en el Colegio Santa María del Pilar, en Madrid, muy próximo al Retiro y cerca de la residencia de su madre, en el barrio del Niño Jesús. Felipe Juan Froilán, al que de pequeño se le conocía por su tercer nombre, por una broma del Rey, es uno de los nietos más queridos de Don Juan Carlos y de Doña Sofía por su carácter inquieto y simpático y por las travesuras que protagonizó cuando era un niño.