El Congreso languidece ante la escasa iniciativa del Gobierno

José Luis Rodríguez Zapatero no ha pisado el Congreso en todo el mes de abril. La gira por China y Singapur le evitó someterse al control de la oposición en el único Pleno del día 13, y el Grupo Popular volcó sus preguntas sobre Alfredo Pérez Rubalcaba, Elena Salgado y Manuel Chaves. Las sesiones de control son la única arteria parlamentaria por donde sigue circulando algo de sangre. A los populares les sirve para calibrar la fuerza del supuesto sucesor de Zapatero, el vicepresidente primero del Gobierno, y los socialistas aprovechan para darse un subidón de moral a cuenta de los ácidos ataques de Rubalcaba contra la bancada de Rajoy.

Más allá de esos rifirrafes puntuales, las hojas de calendario del viejo Palacio de las Cortes van cayendo sin otra expectativa que esperar la disolución de las Cámaras para tratar de reactivar una máquina que renquea, mientras los datos del paro, la crisis de la deuda y el minúsculo crecimiento económico certifican la «eficacia» que han tenido las medidas impulsadas por Zapatero durante esta legislatura.

Ahora que el presidente del Gobierno ha tirado la toalla y ha anunciado que no volverá a presentarse como candidato ha perdido interés hasta el Debate sobre el Estado de la Nación, en el que se medirán un Zapatero saliente y amortizado y un Mariano Rajoy que se ve ya en el Palacio de la Moncloa por muy poco que haga hasta las elecciones. La sensación de que el Gobierno se ha quedado sin cabeza visible se ha instalado en el PP, que apunta a todo lo que se mueve, por si acaso, a costa de perder efectividad en sus críticas. De la noche a la mañana, la culpa de todo, en el mensaje del PP, ya no la tiene Zapatero, sino el PSOE o el Gobierno en su conjunto.

En el horizonte quedan los Presupuestos de 2012, sobre los que pocos dudan de que Zapatero intentará pactar lo que haga falta con el PNV para acabar bien la legislatura. En el peor de los casos, se prorrogarían unas cuentas que luego tendría que gestionar, si se cumplen los pronósticos, el PP tras las elecciones. Junto a los Presupuestos quedan en la agenda leyes «bandera» del PSOE, como la de Igualdad de Trato y No Discriminación o la que regula la «muerte digna». En cuanto a las reformas pendientes, Zapatero, con muy poco más que perder ya y una vez traicionados algunos de sus principios básicos, podría aprovechar estos últimos meses de su mandato para dar otra vuelta de tuerca, con el argumento de que España se ha salvado del «rescate» europeo gracias a su «valentía».

En enero de 2009, Zapatero prometió que comparecería una vez al trimestre para debatir de forma monográfica sobre la crisis económica. La promesa no se cumplió, aunque los debates no han faltado, pues la oposición ha aprovechado cualquier oportunidad para reprochar al Gobierno su gestión de la crisis económica.

El papel del Parlamento en los últimos meses se ha limitado a convalidar los decretos-leyes de contenido económico que ha enviado el Consejo de Ministros, lo que reduce a la mínima expresión el debate de los grupos parlamentarios: uno de medidas urgentes para promover la transición al empleo estable; otro de reforzamiento del sistema financiero; uno más de reforma de las políticas activas de empleo; y otro con medidas urgentes para la corrección del déficit tarifario del sector eléctrico. En total han sido cuatro decretos-leyes desde enero, una fórmula legislativa reservada por la Constitución para casos «de extraordinaria y urgente necesidad», que el Gobierno ha utilizado con holgura a lo largo de la legislatura y que le ha evitado farragosas negociaciones con la oposición con final incierto por su debilidad parlamentaria: en total han pasado por el Pleno 40 decretos-leyes desde 2008.

Hay que bucear en los debates parlamentarios para hallar algún proyecto de ley que haya iniciado su caminar parlamentario en el Pleno procedente de La Moncloa este año. El proyecto de ley del Registro Civil echó a andar en marzo (aunque se presentó en julio), después de sucesivas prórrogas en los plazos de enmiendas. También comenzó su tramitación el proyecto de ley de adaptación normativa a la Convención Internacional sobre los derechos de las personas con discapacidad. En el último Pleno se debatió la totalidad del proyecto de ley de residuos y suelos contaminados. Y ahí se acaba la lista de proyectos que han entrado en el orden del día del Pleno este periodo de sesiones .

El Gobierno también ha remitido a la Cámara el proyecto de ley de reforma de las pensiones, pero el debate aún no ha comenzado porque el plazo de enmiendas se ha ampliado hasta el 27 de abril. Los socialistas quieren asegurarse un amplio acuerdo antes de someter el proyecto al escrutinio del Parlamento.

En Comisión se encuentran ahora mismo otros 13 proyectos de ley enviados por el Gobierno este año, como la ley Concursal. Pero ninguno de ellos forma parte del núcleo duro legislativo y político previsto por el Ejecutivo esta legislatura. La ley de Igualdad de trato y No discriminación, o la ley del Gobierno local, así como la ley sobre cuidados paliativos o muerte digna, siguen esperando su turno, lo mismo que la ley de eficiencia y energías renovables, o la ley de universalización de la cobertura sanitaria del Sistema Nacional de Salud.