La Palma registra más de 40 seísmos en 48 horas

El mayor de los sismos, registrado a las 13.03 horas del sábado, tuvo una magnitud de 2.7 y se produjo en la zona del Parque Natural de Cumbre Vieja. Este evento se localizó a 28 kilómetros de profundidad. El segundo mayor temblor, de 2.6, se produjo a las 01.23 horas del domingo en la misma zona, y el tercero tuvo lugar en la medianoche del lunes, alcanzando una magnitud de 2.1, según el Instituto Volcanológico de Canarias (Involcan).

Ante esta actividad sísmica no habitual -enjambre sísmico-, la Consejería de Política Territorial, Sostenibilidad y Seguridad del Gobierno de Canarias, en aplicación del Plan Especial de Protección Civil y Atención de Emergencias por Riesgo Volcánico, ha convocado para este miércoles el Comité Científico de Evaluación y Seguimiento de Fenómenos Volcánicos, con el fin de valorar los datos obtenidos en redes y estaciones de vigilancia en la isla.

En este sentido, la directora del Instituto Geográfico Nacional en Canarias, María José Blanco, ha explicado que este martes comenzarán los trabajos para incrementar el número de estaciones sísmicas de la red de vigilancia volcánica y también s e intensificarán las medidas geoquímicas que se realizan habitualmente en la isla de La Palma. Asimismo, se desplazará un equipo científico compuesto por cinco personas para hacer un seguimiento de los temblores en el lugar.

Si bien es pronto para hacer una valoración sobre el origen de este fenómeno, María José Blanco ha indicado que no es anómalo, pero tampoco habitual. De hecho, comentó que desde que tienen estaciones sísmicas en la isla «nunca se había registrado un enjambre similar» , y aunque es de muy baja energía y a mucha profundidad, es diferente a la actividad sísmica que habían registrado hasta ahora, añadió.

Hasta el momento ninguno de los sismos ha sido sentido por la población , pues se están produciendo a gran profundidad. El último suceso con relevancia en el archipiélago tuvo lugar en 2011 en la isla de El Hierro, que finalmente desembocó en la erupción de un volcán submarino al sureste de la isla. En esa ocasión, la erupción fue precedida de más de 7.500 seísmos que se prolongaron durante tres meses.